Kate Middleton cambia su maquillaje estrella para brillar con sombras glitter y nuevas cejas

Si algo te funciona, no lo cambies. Aunque pueda sonar aburrido, el lema de la elegancia, avalado por la Casa Real, hace que Kate Middleton tenga tan solo dos tipos de maquillaje para su vida royal. El ajetreado calendario de la duquesa de Cambridge requiere looks fáciles de recrear para que su equipo de estilismo pueda elaborarlos en poco tiempo y sean cuales sean las circunstancias.

Es por esto que encontrarnos a Kate desfilando en la alfombra roja del estreno de la última entrega de James Bond enfundada en un vestido y cargado de strass y glitter de Jenny Packham con un maquillaje acorde a las circunstancias es un auténtico hito beauty en la escena británica, solo al alcance de una auténtica chica Bond.

Recién salida del centro de estética

Eclipsando a los actores de la cinta, Kate se inspiró en las primeras películas del espía británico para trasladar la estética años 60 a su outfit, con el citado vestido de diosa dorada y un estructurado moño cargado de bucles, altura y volumen. Sin embargo, lo más destacado era el rostro radiante de la duquesa, que parecía recién salido del mejor centro de estética de Hollywood.

La calidad de la piel de Kate siempre nos ha ofrecido un rostro sin manchas o cualquier otro tipo de imperfecciones, siendo necesario tan solo aplicar una ligerísima capa de base de maquillaje para igualar el tono y un rubor rosado para dotar de unas mejillas saludables a la duquesa. Pero el estreno londinense de la última película de 007 parecía requerir un acabado aún más llamativo.

La piel de Kate lucía absolutamente radiante y jugosa, alejada del empolvado y mate acabado con el que se muestra a diario. Otro aspecto destacable era la frente pletórica y absolutamente libre de cualquier tipo de arruga o signo de expresión. Paralizado con mucha naturalidad, el tercio superior del rostro podría haberse visto beneficiado de toxina botulínica para eliminar arrugas o rellenos faciales en el área del contorno de los ojos, especialmente en las denominadas ‘patas de gallo’.

Por supuesto, el glow de la piel, además de explicarse con una prebase iluminadora y una base de maquillaje fluida para ese acabado jugoso y dewy (casi mojado), es bastante probable que la duquesa de Cambridge haya aprovechado el final del verano para realizarse algún tipo peeling facial con el que eliminar impurezas y conseguir un tono uniforme.

¿Kate lleva microblading o es un brow lamination?

Lo que parece bastante evidente es que la duquesa acaba de pasar por un centro de estética o un salón de belleza ya que al estado radiante de su piel se le suman unas renovadas cejas. Si bien es cierto que Kate Middleton siempre ha presumido de unas cejas abundantes y con una forma recta muy bonita, en esta última ocasión no solo se veían brillantes como si llevaran una capa de gel fijador transparente, también parecían más definidas y peinadas.

Mientras el microblading tatúa en capas más superficiales pelo a pelo para rediseñar la forma de la ceja y cubrir algunas calvas, el brow lamination es algo así como un alisado de cejas con las que estirar y peinar el pelo, creando el efecto ‘lion mane’. Vistas al detalle, las cejas 'recién hechas' de Kate Middleton podrían parecer resultado de una micropigmentación por el nacimiento de la ceja; sin embargo, el resto de la ceja, en el que no se detecta el trazo de lápiz de tatuaje, parece indicar que se trata de un brow lamination de libro.

Colocación recién hecha

Como si acabara de salir del salón de belleza, otro detalle de esa puesta a punto para un día especial lo encontramos en el cabello, en concreto en las raíces. Acercándonos al máximo a la zona de las patillas, en las raíces a la altura del ojo, se aprecia con facilidad cómo en la piel aún quedan pigmentos de la coloración avellana de la duquesa, que parece haber sido aplicada para cubrir raíces y alguna que otra cana en el nacimiento del cabello.

Maquillaje satinado

Para potenciar el acabado ultraluminoso del maquillaje e inspirados en la estética de Charlotte Tilbury, los estilistas de Kate Middleton eligieron un maquillaje apoyado en las sombras satinadas tipo gold -rabiosa tendencia de maquillaje-. Un dorado champán maquillaba el párpado móvil, continuando con esa paleta de sombras irisadas, mientras que para el acento se utilizaba una sombra bronce más oscura.