Si tienes cejas rebeldes, solo necesitas un 'brow lamination' para domarlas y alisarlas

Cuando alguien dice que tiene unas 'cejas rebeldes', se despliega un amplio abanico de posibilidades que va de las cejas de pelo fuerte a las poco pobladas y despeinadas, pero jamás nos olvidaríamos de las rizadas. Si las padeces, en tu rutina diaria estarás acostumbrada a invertir unos rigurosos minutos en su peinado, fijación y color, así que, si de repente alguien te menciona una solución a largo plazo, la curiosidad está más que justificada.

Llega entonces el momento de hablar del brow lamination, un tratamiento que podría describirse como ‘la permanente de las cejas’ para lucirlas perfectas. Incluso hay quien lo llama 'lifting' por su poder para estirar... ¡El pelo de las cejas!

En plena década en la que las cejas gruesas son la cumbre de la sofisticación, la belleza y la naturalidad, quienes tienen cejas abundantes, rizadas, despeinadas… y rebeldes en general saben lo complicado que es someter el pelo a los mandatos de la belleza. ¿Cómo conseguir las cejas de Cara Delevingne cuando, a pesar de tener volumen, el pelo es indomable? Se llama 'brow lamination', sus resultados duran dos meses y tus cejas se parecerán a las maravillosas cejas que ves en Instagram cada día.

Con un tratamiento de unos 50 minutos, esta técnica que tiene sus orígenes en Rusia se ha extendido por países como Irán y más recientemente en Inglaterra, donde su popularidad ha hecho que decenas de centros estéticos lo incluyan entre sus especialidades. Su técnica consiste en alisar y peinar las cejas de forma ascendente para ampliar su tamaño, sin recurrir a técnicas invasivas como el microblading ni aplicar extensiones. La otra parte seductora de su fórmula es que sus impactantes resultados duran hasta dos meses.

Paso a paso

El tratamiento es sencillo. Primero se limpia en profundidad toda la zona y se define cuál es el diseño más adecuado para cada paciente. Una vez se sabe la longitud, grosor y arco de las cejas, se aplica un producto que rompe la forma y curvatura de la ceja, justo igual que hacen los tratamientos de permanente, moldeado, los diferentes alisados y la queratina con el cabello.

A continuación, se peina la ceja con movimientos ascendentes, reorientando el pelo de forma vertical hasta lograr la forma y grosor deseados. Es importante que todo el vello quede peinado hacia arriba.

El siguiente paso es aplicar un neutralizador, como lo llaman algunos especialistas, o setting lotion, y que hace las veces de gel fijador, asentando la nueva forma que le hayamos dado a la ceja, así como la dirección del pelo. Es importante señalar que, en su totalidad, este tipo de sérums son hipoalergénicos para evitar infecciones y que una gran mayoría son veganos.

A continuación se cubre con un papel adhesivo, del tipo ‘film’ durante 30 minutos. Es precisamente durante este paso cuando el vello de la ceja se 'rinde' a la forma que le hayamos dado, justo igual que ocurre con los clásicos alisados japoneses.

Por último, se aplica un aceite nutritivo para humectar el pelo y evitar que se reseque como resultado de los productos utilizados durante el tratamiento.

Después del proceso, cuando nuestra ceja ya tiene el aspecto de las cejas que vemos habitualmente en modelos o en Instagram, toca afinar el trabajo, depilando el vello sobrante, recortando en el caso de que el pelo esté demasiado largo o tintando las cejas, este último retoque es el encargado de que el resultado sea más visible, en el caso de las personas con el pelo más claro.

Voilà, estrena cejas y mirada

El resultado es el de una ceja con el pelo liso, en la misma dirección, con más volumen y definición, que apenas necesita cuidados más allá del cepillado diario. Los resultados pueden durar hasta dos semanas en los casos en los que el pelo sea más fuerte y hasta diez semanas si se trata de un vello más fino y débil.

Aunque esta técnica aun no está disponible en nuestro país, en Inglaterra cuesta entre 50 y 60 libras, un precio bastante asequible frente a los precios más altos del microblading que, aunque ofrece resultados más duraderos, sí es un método invasivo.

¿Qué logra exactamente el brow lamination?

El principal, y más visible, resultado es el de una ceja más definida, en la que cada pelo sigue la misma dirección del resto, creando una sensación de uniformidad. Al reubicar cada pelo y peinarlo, logramos cubrir las pequeñas clavas. Ideal para personas que han perdido parte de sus cejas como resultado del paso de los años, enfermedad o el exceso de depilación.

Las más beneficiadas con el brow lamination son las cejas rebeldes, aquellas en las que los pelos rizados se alborotan y campan libres cada uno en una dirección, aquellas en las que el exceso de vello está mal ubicado y a menudo emborrona cualquier maquillaje. Espesas y sin forma.

Además de rellenar aquellas zonas en las que no tenemos pelo, también es una buena técnica para alargar la ceja en el caso de que sean cortas.

A largo plazo, la repetición del brow lamination puede mejorar la dirección de las cejas, favoreciendo que crezcan en el mismo sentido. “El tratamiento también ayuda a estimular el crecimiento del cabello”, aseguraba a 'Byrdie' Nina Nurian, fundadora de iBrowBar.

Mantenimiento

Como si de una permanente de toda la vida se tratara, después de haber sometido a nuestras cejas a un brow lamination, queda prohibido que estas estén en contacto con el agua en las 24 horas siguientes al tratamiento. Hay que evitar mojarlas al lavarnos la cara, sudar y todas las situaciones habituales en las que nuestro rostro se expone al agua.

Para mantener su alisado y lifting en las mejores condiciones, es necesario hidratarlas a diario ya que el tratamiento reseca el pelo. Se recomienda el uso de aceites o sérums específicos para hidratar y acondicionar la piel y el pelo tras el tratamiento.

El último consejo es peinarlas a diario para que no pierdan su forma ascendente.

Posibles daños colaterales

Al tratarse de una zona tan sensible, es posible que la piel del contorno de los ojos se irrite, apareciendo enrojecimiento y eccemas. En muchas de la spublicaciones que encontramos en Instagram, es habitual ver cómo todo el perímetro alrededor de las cejas está visiblemente enrojecido e hinchado, efectos que pasan al poco tiempo.

También se corre el riesgo de que el pelo se reseque en exceso, resultado de los cosméticos aplicados. Perder fibras, que las cejas sean más débiles y quebradizas o incluso la aparición de calvas son otros aspectos adversos.