El espejo perfecto para ampliar tu salón (o dormitorio) es esta novedad de Ikea

Uno de los trucos más sencillos en decoración para conseguir que una estancia se vea más grande es escoger un buen espejo para ella. Al colocarlo en el lugar adecuado, podremos conseguir que nuestro salón se vea más espacioso, pero también podremos lograr que el dormitorio parezca mucho más luminoso. Ikea sabe esto y por eso tiene espejos como estos de la colección Svansele para tratar de seducirnos.

No es una tarea demasiado complicada porque, como hemos señalado, un espejo puede ser clave para cambiar por completo la esencia de una estancia. Podemos hacer que parezca mucho más grande si conseguimos que la zona que se vea reflejada sea una que sume profundidad y, si lo colocamos cercano a la ventana, la luz natural se verá multiplicada. Estos efectos sumados son el sueño de cualquiera que desee que su casa se vea mayor.

Todas las estancias pueden beneficiarse de un espejo colgado en la pared, apoyado sobre un mueble o colocado estratégicamente en el suelo, creando con sutileza un efecto desenfadado y relajado en la habitación, aunque el fondo sea una decisión muy meditada. Así, si estás cansada de que entrada, distribuidor o pasillo parezca un túnel oscuro, nada mejor que colocar una pequeña lamparita y el espejo más cuadrado de esta colección.

Tiene el diseño ideal para poder moverlo a nuestro antojo por toda la casa, este en concreto tiene un diseño depurado gracias a su estiloso marco, de esquinas biseladas y redondeadas, y cuesta 50 euros. Además, su acabado dorado nos invita a probarlo en otras estancias, consiguiendo un acabado romántico, sofisticado o rompedor en función de los complementos que pongamos a su alrededor.

Si tienes claro que es el dormitorio el que necesita ese toque especial, seguro que la siguiente opción que nos ofrece la firma de decoración escandinava te parece la idónea. En lugar de tener las cuatro esquinas completamente iguales, como la primera alternativa, encontramos que uno de sus lados es recto, lo que hace de él el perfecto espejo de tocador.

Su tamaño es mucho más grande (78 cm por cada lado, en lugar de 53x63 cm, que medía el anterior), lo que lo hace ideal para colocar sobre una mesa de estudio para maquillarnos por la mañana o sobre una cómoda, creando el rincón perfecto para ampliar el espacio a la par que darnos los últimos retoques antes de estar listas para afrontar el día. Te lo puedes llevar a casa por 60 euros.

¿Qué pasa con el salón? No nos hemos olvidado de esta estancia, pero consideramos que es la tercera de las opciones que nos ofrece esta colección la que mejor puede adaptarse al cuarto de estar. Un espejo de gran tamaño y forma rectangular, cuyo precio es de 90 euros, que podremos poner en cualquier dirección, pero que el horizontal sobre la zona de comedor o el sofá puede darnos unos resultados sorprendentes.

Tres opciones parecidas, pero a la vez muy diferentes, que se adaptan a nuestro hogar y que nos permiten crear un ambiente agradable y acogedor. Ikea nos invita a jugar con las formas y tamaños para diseñar un espacio único, estiloso y cargado de magia, un pequeño detalle que se repita a lo largo de las diferentes estancias y que nos ayude a crear una decoración coherente y personal, sin tener que renunciar a presumir de una casa un poco más grande y luminosa.