Barcelona: cinco restaurantes de cocina internacional para todos los gustos y bolsillos

En Barcelona hay restaurantes de cocina internacional que subliman la gastronomía de otros países, confirmando aquello de que la ciudad es un 'crisol de culturas', 'una tierra de acogida' y todos los tópicos que tan bien quedan en los discursos institucionales. Si además le añadimos que Barcelona vive un idilio food lover y que el gusto por la decoración es religión, el resultado se materializa en la propuesta que hoy te traemos: cinco restaurantes con cocina internacional y/o fusión para todos los gustos y bolsillos. ¡Palabra de globber trotter!

Achaar Bar: la India más cool

La gente de Fish & Chips Barcelona y de Baby Jalebi conquistó hace tiempo el corazón de los barceloneses con su inconfundible estilo: restaurantes informales y muy cools con una cocina exquisita donde el producto es el protagonista. Ahora acaban de abrir, en el muy en tendencia barrio del Poblenou, un bar de vinos con cocina india… ¿O deberíamos decir un restaurante indio con vinos naturales?

Achaar Bar es una cantina deli donde podrás degustar platos deliciosos (y un poco picantes) de cocina india como pani puri (especie de falafel relleno de patata, garbanzos y arándanos que se moja en salsa de yogur y menta), costillas de cordero al tandoor o el palak paneer, unas espinacas con queso paneer que hacen saltar lágrimas.

El local huye de los colorinchis típicos hindús (no verás un Shiva saludándote en el lavabo) y abraza una estética industrial desconchada y con carácter. Incluso hay una sala escondida tras una cortina que se puede reservar para grupos y que se utiliza también para hacer catas.

En Achaar Bar encontrarás carta de mediodía y de noche a precios muy razonables y la sumiller, Irene Cavagli, sabrá aconsejarte el vino ideal para cada plato (que puedes ir probando a copas, lo que es un plus). Y es que, por si no te habías dado cuenta, los vinos naturales son tendencia absoluta en el mundo food lover, con comunidades como Vinos Libres y su mapa de bar-à-vins que no para de crecer. En definitiva, Achaar Bar es un nuevo tesoro en la ciudad.

Passeig Escribà: Japón y Perú en el Eixample

Roberto Sihuay ya nos tenía muy bien acostumbrados en Ceviche 103 y ahora su restaurante Passeig Escribà Nikkei es la culminación de su amor por la cocina peruano-japonesa. Sihuay consigue que le traigan de las tres grandes zonas peruanas (costa, sierra y selva) los ingredientes más especiales y auténticos —como el ají charapita (más picante pero más efímero que el ají limo)— y juega con ellos con la maestría de un prestidigitador. Cada plato es una obra de arte de textura, sabor y contrastes.

El uramaki de langostino, por ejemplo, viene con una tempura exquisita de panko y tiene un equilibrio perfecto de temperatura y picante. El ceviche de atún se elabora con el mencionado ají charapita, pero su picor se suaviza con la leche de tigre amarillo y los chips de patata. La presa ibérica hecha al horno Josper se adoba con una salsa a base de ramen, ají amarillo y umeboshi (una ciruela japonesa) y se acompaña de puré de yuka con cilantro y remolacha deshidratados.

Y los ingredientes de la selva peruana hacen su entrada triunfal en la estrella de la carta, el arroz chaufa con carnes y chorizos especiados con achiote y otras especias, y con una textura al punto que hace palidecer a cualquier maestro paellero. El local es colorido y espacioso, ideal también si vas en grupo, y tiene menú mediodía, algo que se agradece enormemente, sobre todo en los alrededores del muy estirado Passeig de Gràcia.

Fismuler: pureza nórdica meets cerdo ibérico

Aunque suene a noruego, Fismuler es una palabra inventada que, eso sí, juega a evocar esencias nórdicas. Y es que el chef e ideólogo de Fismuler, Nino Redruello (La Ancha, Las Tortillas de Gabino, Armando, La Taberna de la Ancha, Molino de Pez, The Omar, Hijos de Tomás y Club Financiero en Madrid), lo tuvo muy claro tras viajar a Escandinavia y descubrir la cocina nórdica, donde el producto es el principio y el fin, sin trampantojos ni trucos de chistera.

Así que en 2016, la familia La Ancha abrió en Madrid Fismuler, un restaurante que ya es icónico, y bastante tiempo después llegó a Barcelona. En la Ciudad Condal caló inmediatamente su cocina honesta y artesana que combina ingredientes a priori dispares.

Aquí la originalidad y la creatividad radican precisamente en mezclas que a ti no se te ocurrirían en la vida, pero que acaban teniendo un match de manual. ¿Ejemplos? La dorada curada con azúcar y sal, uva tinta, sriracha y almendra tostada; las navajas gratinadas con cebolleta tierna o la estrella de la casa, el escalope de San Román con huevo y trufa.

El espacio tiene una estética desnuda y austera, pero aun así es sorprendentemente acogedor. De día la luz entra por sus amplios ventanales y de noche… ¡Ay, de noche! No te sorprendas si acabas bailando la conga, porque los días de música en directo la cosa se anima. Eso sí que no lo tienen en Helsinki.

Coya: siéntete como un inca en la cima del mundo

Responsables de llevar la cocina peruana a los lugares más top del mundo, el Grupo Coya Global abrió su restaurante número 11 el año pasado en Barcelona, ni más ni menos que en el Hotel W.

Ponte tu mejor outfit —aquel con el que te sientes el rey o la reina del mambo— y prepárate para entrar en un espacio de inspiración latinoamericana con toques mediterráneos, lleno de detalles, artesanía y texturas. O, si lo prefieres, reserva en su terraza de ensueño.

Una vez tomes posesión de tu trono, disfruta de platos peruanos tan icónicos como el ceviche de marisco, los anticuchos, los tiraditos o los tatakis, y también platos de autor como el bife angosto wagyu o el pato laqueado mientras suena música de fondo y disfrutas de las vistas.

Coya Barcelona cuenta con un pisco-bar con una selección de cócteles de pisco, como su famoso pisco sour de fruta de la pasión, pero también con otras creaciones mixológicas locales hechas especialmente para esta casa, así como una buena selección de cócteles 'sin' por si (oh, vaya) no te alojas en el hotel y tienes que conducir.

L'Italiano Perso: ¡mamma mia la pasta!

Restaurantes italianos hay muchos, pero... ¿restaurantes italianos que te hagan exclamar “¡mamma mia!” en cada bocado? Pues eso. En la parte alta de Barcelona, este minúsculo restaurante de tan solo seis mesas se ha hecho un merecido hueco.

Rodéate de fotografías de Luciano Pavarotti o Robert De Niro tomando unos espaguetis mientras te metes entre pecho y espalda una lasaña que te reconcilia con la vida o un auténtico plato de pasta artesana y tradicional a la amatriciana o a la carbonara.

Acaba tu viaje con el que posiblemente sea el mejor tiramisú de Barcelona y reconcíliate con la vitta.