Álex García, Verónica Echegui y Manuela Vellés: el culebrón que nunca fue

A Álex García se le dan bien las comedias románticas. También en su vida privada. Desde hace años, su noviazgo con Verónica Echegui es uno de los más estables del cine español, en el que abundan las 'parejitas' que tienen tanta química en la pantalla como fuera de ella. Pero, como en toda comedia romántica que se precie, también han existido enredos. O comedias de enredos a la altura de la obra homónima de Shakespeare.

El de Álex (y el de Verónica, afectada colateral) llegó a mediados de esta década, cuando varios medios publicaron unas fotografías suyas con Manuela Vellés en actitud cariñosa. Era noviembre de 2015 y el joven salía de una de las funciones de 'El burlador de Sevilla', en la que entonces participaba. Los abrazos con Vellés dieron que pensar ya que, por aquella época, ella acababa de romper con Miguel Ángel Muñoz.

¿Qué había de cierto en aquellas imágenes? ¿Eran novios Manuela y Álex o solo amigos? La duda quedó resuelta pocos meses después cuando, ante la sorpresa de la prensa, el actor apareció en la ceremonia de los Goya con su novia de siempre, Verónica Echegui. Asaltada por varios reporteros en plena alfombra roja, la protagonista de 'Yo soy la Juani' respondió tajante a las preguntas sobre ella y su novio. "Es difícil vivir en medio de este show, de este circo, y dejarse arrastrar por absurdeces (...) Paso de ese mundo porque hace daño y prefiero ni entrar. No son verdades, no se corroboran, no van hacia ningún lugar. Con esto estoy diciendo que no digo nada más. Prefiero no hablar de ese tema ahora mismo. Manuela es una compañera maravillosa, está espléndida en el teatro, seguirá trabajando y la seguiremos todos seguro", respondió tajante. La duda, pues, quedó resuelta: nunca había roto con Álex y Manuela no era más que una buena amiga de ella y de su chico.

De hecho, nada ha perturbado la relación entre Álex García y Verónica Echegui desde 2010. Ese año ambos vivían un gran momento profesional. Ella había saltado al estrellato gracias a 'Yo soy la Juani' (2006), en la que se puso a las órdenes de Bigas Luna. Y, desde entonces, se convirtió en un rostro habitual en nuestras pantallas.

Él había participado en 'Sin tetas no hay paraíso' o en 'Amar en tiempos revueltos', dos iconos televisivos que lo convirtieron en el chico de moda. Desde entonces hasta ahora, los dos han preferido mantener su relación a buen recaudo de la prensa, pese a que no sea difícil verles posar en premières o entregas de premios.

Talentosos, guapos y simpáticos, han construido su carrera a golpe de intuición, consiguiendo mantenerse en una industria a veces precaria con éxitos que van desde 'La novia' (en el caso de él) a 'Seis puntos sobre Emma' (en el caso de ella). Los discursos de él sobre igualdad dejan claro que ambos coinciden en su visión de la vida.

"A mi pareja me gusta invitarle por generosidad, no porque tenga que ser el chico el que lo hace, porque siempre ha sido así. Me gusta hacer estas cosas desde un lugar más sano, no desde ese rollo antiguo de 'las damas primero'. He localizado que tengo muchos más pensamientos machistas de los que yo pensaba. No me ha gustado descubrir eso y me ha sorprendido un montón", le confesó hace años a la periodista Amalia Enríquez.

Más allá de malentendidos como aquel, Verónica y Álex forman una pareja con visos de futuro. Los triángulos, como el de la lorquiana 'La novia', se quedan para el cine.