Parte de las cenizas de Carmen Sevilla sí se han recogido (pero no por su hijo Augusto)

Es uno de los temas más comentados del día, sobre todo por lo sorprendente. Tal y como adelantaba este miércoles 'ABC', las cenizas de Carmen Sevilla siguen en el tanatorio, 105 días después de su incineración. Y hay nuevos datos sobre este asunto, a los que ha tenido acceso en primicia Vanitatis. Tal y como nos ha confirmado su sobrina, parte de las cenizas de Carmen Sevilla sí que han sido recogidas, aunque no por su hijo, Augusto Algueró.

Vanitatis ha podido contactar con Elena, una de las hijas de Pepe García Galisteo, el hermano al que Carmen estaba más unida y con el que la artista tenía una estrechísima relación. Elena nos confirma que, efectivamente, junto a su hermana Carmen, recogió hace un tiempo las cenizas de su tía. Cuando falleció, solicitaron a su primo Augusto un relicario con parte de esas cenizas para poder guardárselas. Augusto accedió entonces a que ambas tuvieran ese relicario, que se separó de la urna principal.

Ambas pudieron recoger ese relicario en el tanatorio de Pozuelo, donde se le dio el último adiós el pasado junio. Fue entonces cuando uno de los operarios del centro aseguró a Elena y Carmen que la urna principal aún no había sido recogida por el hijo de Carmen Sevilla, Augusto Algueró, quien es la única persona autorizada para hacerlo. "Con mi primo no tengo mala relación, tampoco buena; es mínima", nos explica al asegurar que se ofreció entonces para recoger las cenizas de su tía en nombre de Augusto Algueró. Pero él rechazó esa opción.

Así, el relicario que tienen las dos sobrinas de Carmen descansa ahora en una casa de Málaga, junto a las de su hermano Pepe. Un lugar elegido por Carmen y Elena para que los dos hermanos, que tanto se quisieron en vida, reposen juntos.

Su intención, como nos cuenta la propia Elena, es "cumplir en la medida de lo posible las últimas voluntades" de su tía. Según nos dice, cuando aún estaba lúcida, expresó su deseo de ser incinerada y que parte de sus restos fueran esparcidos por Marbella, mientras que quería que la otra parte descansara junto a sus padres en el cementerio sevillano donde están enterrados. Pero, para cumplir esas últimas voluntades, necesitan la autorización de Augusto Algueró, que de momento no parece estar por la labor de dársela.

También nos cuentan que, obedeciendo a la fe de Carmen Sevilla y teniendo en cuenta que no hubo ningún funeral 'oficial', más allá del organizado por Rappel para honrar la memoria de la artista, ellas han preparado una misa el próximo lunes en la iglesia San Francisco de Borja de la calle Serrano de Madrid. Una cita a la que, por supuesto, han invitado a Augusto Algueró, aunque nos adelantan que, en principio, no va a acudir.

Elena y Carmen fueron dos de las poquísimas personas que pudieron estar en el tanatorio de Pozuelo para dar el último adiós a Carmen Sevilla, junto con el propio Augusto, la exmujer y los dos hijos de este, una prima de la artista y Álex y Angelines, las dos personas que la cuidaron y estuvieron más cerca de ella en sus últimos años. Elena nos matiza, además, que dada la mínima relación que tiene con su primo, pensaba que ni ella ni su hermana iban a poder ir, por lo que se sintieron muy agradecidas cuando las avisó: "Tengo que agradecerle que nos invitara al responso celebrado en el tanatorio".

Ahora solo queda que dé su autorización para que las cenizas, 105 días después de su incineración, puedan salir del tanatorio donde aún siguen y puedan cumplirse las últimas voluntades de la querida actriz.