Una empresa de Enrique Ponce entra en la lista de morosos y Hacienda le reclama 620.000 €
La Agencia Tributaria ha hecho pública recientemente la relación de contribuyentes que más deben a las arcas públicas. Una empresa del diestro debuta en el listado
A finales de junio la Agencia Tributaria hizo pública la lista de los grandes morosos, que son aquellos que a cierre de 2023 deben más de 600.000 euros a las arcas públicas. En total, Hacienda calcula que estas personas o entidades deben algo más de 12 mil millones de euros al Estado. Como cada año, los medios juegan a encontrar entre esta relación de seis mil nombres algún apellido famoso con el que generar atención sobre esta medida ejemplarizante que se puso en marcha por primera vez en tiempos de Cristóbal Montoro. Se trata, como admiten las autoridades fiscales, de incentivar el pago "para evitar el descrédito social y la pérdida de prestigio profesional que supone aparecer en este tipo de listados". Algo que le acaba de pasar al torero valenciano Enrique Ponce, como desvelamos en exclusiva.
Si en 2015 la cifra de corte para aparecer en esta relación de nombres se situó en un millón de euros, hoy ha bajado hasta los 600.000 y se ha ampliado la categoría de morosos para acoger también a los responsables solidarios. Entre los 6.084 deudores de 2023, un 0,1% más, se encuentra el empresario y expresidente del Fútbol Club Barcelona Joan Gaspart o la sociedad Roig Grupo Corporativo, vinculada al empresario y expresidente del Valencia Club de Fútbol Francisco Roig.
Este año han seguido apareciendo algunos 'veteranos', como Agapito García Sánchez, uno de los contribuyentes que más debe al fisco, ya que su deuda supera los 15 millones; el exbanquero Mario Conde con 6,4 millones, o el exárbitro José María Enríquez Negreira, con 1,1 millones. Entre los nombres más glamourosos se encuentra la actriz Paz Vega (María Paz Campos Trigo), que ha reducido su deuda pero la mantiene en 1,7 millones, o Luis Medina, el hijo pequeño de Naty Abascal, que debe 641.000 euros a las arcas públicas. La cómica Patricia Conde ya se ha puesto al día y este año no forma parte del casting.
El caso Ponce
Para aparecer en esta publicación, se tienen que dar una serie de condiciones, como que las deudas se encuentren por encima de los 600.000 euros, que no hayan sido pagadas transcurrido el plazo original de ingreso en período voluntario, que estén pendientes de pago a 31 de diciembre de 2023 y que no estén aplazadas o suspendidas por cualquier motivo legalmente previsto.
Los datos no cambian demasiado respecto a los de hace un año, ya que aunque 770 deudores han abandonado la lista, han entrado 778 morosos nuevos, entre los que se encuentra alguna sorpresa. La sociedad Sucesores de Benito Zoido, perteneciente al conglomerado empresarial de torero Enrique Ponce, es una de las debutantes este año con una deuda de 620.287 euros. Fuentes del entorno del torero, que se encuentra en plena actividad taurina, nos explican el por qué.
La deuda viene motivada por un negocio que se ha demorado más de lo que esperaban. Enrique Ponce y sus asesores vendieron una finca a un tercero pero el comprador, según explican las citadas fuentes cercanas al diestro, aún no ha abonado todo el dinero debido. "Al suscribirse un contrato de compraventa se genera una obligación tributaria, que es lo que nos reclaman, pero nosotros aún tenemos parte de la venta pendiente de cobro. Es un tema que está hablado con la Administración y hemos negociado un aplazamiento", aducen. "Enrique Ponce es una víctima más, en este caso por el incumplimiento de un tercero". Remarcan que es la venta la que provoca esa obligación tributaria, que dicha venta está en parte pendiente de cobro y que ya han negociado un aplazamiento con la Administración, que muy probablemente requerirá a su vez al comprador por ese impago.
Sucesores de Benito Zoido, que está domiciliada en Navas de San Juan (Jaén), se dedica a la compra, venta y explotación de bienes inmuebles rústicos, así como a la promoción, construcción, arrendamiento y reforma de edificios. A su nombre aparece en el Registro Mercantil un olivar en Sorihuela de Guadalimar de 9.000 metros cuadrados. En 2022 ya vendieron otra finca propiedad de la sociedad por 1.891.900 euros.
La entidad es propiedad de CPM Building, el holding de Ponce, del que pende también otra de sus empresas inmobiliarias, Onubecam. A lo largo de los años, Sucesores ha estado administrada por la gente de confianza del torero, como Tomás Poblaciones o su hermano, Álvaro Ponce.
En el último ejercicio del que hay datos, 2022, las principales empresas de Ponce arrojaron números negativos. Para intentar solventar la situación, se tuvieron que tomar decisiones dolorosas. En 2022, el torero vendió una de las parcelas que conformaban el conjunto de su gran finca jiennense, La Cetrina, un terreno de 40 hectáreas con 3.000 olivos por el que recibió casi 900.000 euros. También, como contábamos antes, una finca de Sucesores.
Enrique Ponce ha sido y es uno de los mejores toreros de la Historia, pero no ha sido bien aconsejado en su faceta como empresario. Más allá de las socorridas inversiones inmobiliarias, no ha tenido demasiada suerte con las iniciativas que ha puesto en marcha, como le ocurrió hace años con un espectáculo que mezclaba el toreo con la música.
A finales de junio la Agencia Tributaria hizo pública la lista de los grandes morosos, que son aquellos que a cierre de 2023 deben más de 600.000 euros a las arcas públicas. En total, Hacienda calcula que estas personas o entidades deben algo más de 12 mil millones de euros al Estado. Como cada año, los medios juegan a encontrar entre esta relación de seis mil nombres algún apellido famoso con el que generar atención sobre esta medida ejemplarizante que se puso en marcha por primera vez en tiempos de Cristóbal Montoro. Se trata, como admiten las autoridades fiscales, de incentivar el pago "para evitar el descrédito social y la pérdida de prestigio profesional que supone aparecer en este tipo de listados". Algo que le acaba de pasar al torero valenciano Enrique Ponce, como desvelamos en exclusiva.