Antonio Granero, famoso cocinero y político, habla del asesinato en el que se ha visto envuelto su hijo: sus duras palabras

• La trabajadora social asesinada denunció amenazas previas y un menor fue condenado
• La familia de uno de los menores del crimen de Badajoz: "Que la Justicia actúe con contundencia"

El pasado domingo 9 de marzo un terrible suceso conmocionó la urbanización Guadiana, en Badajoz. La trabajadora social María Belén Cortés Flor, de 35 años, fue asesinada por tres adolescentes de la casa tutelada donde trabajaba. Una muerte que ha conmocionado a todo el país, poniendo el foco de atención en los tres adolescentes, de 17 años, 15 años y 14 años, que ya están en régimen de internamiento cerrado, pero también en el sistema.

La educadora había denunciado previamente la situación laboral en la que se encontraba, como ya desveló 'El Confidencial'. Ahora, ha sido el padre de uno de los adolescentes, quien también ha puesto el foco en los problemas de las administraciones al tratar estos temas. Se trata de Antonio Granero, un cocinero muy conocido en Extremadura por su trabajo en la televisión autonómica durante muchos años y miembro del partido Juntos por Extremadura.

A través de unas declaraciones para 'El Mundo', el padre de D.G.P., ha querido mostrar su apoyo y condolencias a la familia de la fallecida, pero también cargar contra el sistema de menores. "Lo que ha pasado es terrorífico, pero ni mi hijo ni el resto de menores que vivían en ese piso con la educadora deberían haber estado en libertad desde hace tiempo. (...) Es una locura que les permitieran regresar al piso donde ya había habido problemas y dejarlos solos con ella", reflexiona.

Además, a través de estas palabras asegura que su hijo "se convirtió en una víctima prácticamente desde que nació". Así, aunque no justifica el crimen de su hijo, sí explica cómo el sistema de menores no le protegió, según su versión. El cocinero explica que su exmujer se quedó con la custodia de sus tres hijos hasta hace seis años, a pesar de los problemas de drogas de ella.

"Pero nadie hacía nada, año tras año"

"El que estuviera mi hijo solo con ella es la clave de todo esto. (...) Mi hijo no iba en esa época al colegio, su madre se desentendía, perdía cursos enteros y en un año podía perder tranquilamente 700 horas de asistencia a clase, y eso lo sabía todo el mundo, está registrado, lo sabía la Administración, lo sabían los profesores, los directores... Pero nadie hacía nada, año tras año, salvo, tengo que decirlo, el Colegio San José de Villafranca, que sí ayudó", añade.

Por ello, aprovecha para explicar que tanto los años que su hijo convivió con su madre, con problemas de adicción a las drogas, según sus declaraciones, y el sistema de centros tutelados, son responsables también de este hecho: "¿Alguien puede entender que los vuelvan a enviar al mismo piso tutelado, de donde ya se han escapado tres veces, y donde había habido problemas, cuando le dijimos a la Guardia Civil la última vez que los encontraron que lo iban a volver a hacer?".

"El enorme daño que se ha hecho, la muerte de la educadora, eso ya no se puede reparar, pero a ver si sirve para que no se vuelva a repetir", reflexiona también sobre el sistema de los centros tutelados, que acusa de estar dirigidos "a dedo" por personas afines a cada partido para sacar dinero. "Tenían que estar privados de libertad, tenían que estar encerrados en otro centro, sin que pudieran salir, eso creo que lo entiende cualquiera, no es que lo diga yo", zanja para 'El Mundo'.