¿Venganza contra los Bosé? La otra versión del robo del Picasso

Lucía Bosé permanece ajena a la polémica que se está generando con el ya famoso dibujo de 'La chumbera' de Pablo Picasso. Un esbozo que pintó el artista para la tata Remedios, una mujer que trabajó durante toda su vida para la familia Bosé-Dominguín y que se ganó el afecto no solo del clan, sino también de algunos de sus famosos amigos. Tras su muerte, el 5 de abril de 1999, el dibujo quedó colgado en la pared de la habitación que ocupaba en casa de Lucía Bosé y tras el paso de los años, esta decidió sacarlo a subasta en 2008 junto a otros objetos de incalculable valor emocional para la familia. 'La chumbera' logró alcanzar un valor de mercado de 198.607 euros. Ahora, dos de las sobrinas de la tata Reme reclaman su porción del pastel, pero su hermano Felipe ha puesto en jaque la versión que ambas mantienen, acusándolas de iniciar una venganza.

Remedios murió sin descendencia directa, pero legó sus propiedades inmobiliarias a su hermana, también soltera y sin hijos. Nada se decía del cuadro, pero once años después, los hijos de otro hermano de la tata Reme tuvieron constancia de su existencia, justo después de su venta, lo que consideran un agravio a sus intereses económicos, pese a que sí que heredaron siete casas que, según su hermano Felipe, fueron pagadas por los Bosé: cinco pisos a una y otros dos a la otra.

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La relación entre los cinco hermanos se ha roto por completo a raíz de esta querella contra Lucía Bosé, a la que Felipe consideraba como una hermana más de su tía, debido a su cercanía. No comprende cómo sus hermanas han decidido iniciar un proceso legal “solo por el dinero”, como así mantiene en conversación con 'El programa de Ana Rosa' este jueves. “Son personas que siempre han ido a sacar el dinero escarbando. Mi hermana Manoli estuvo trabajando con Miguel Bosé 15 años, pero se comenta que a mi hermana se le fue la mano, según tengo entendido, y la echaron al mes de morir mi tía”, explica Felipe, que considera que este proceso judicial iniciado 11 años después de la venta del cuadro se explica como “una venganza contra los Bosé por su despido”.

“Hace tres o cuatro años, me vino mi hermana en una fiesta hablando del cuadro y la dije que era una sinvergüenza. Para mí, esa gente, por respeto a mi tía, se ha portado siempre bien”, asegura Felipe, que explica los favores que los Bosé hicieron a su familia, como la vez que Luis Miguel Dominguín le regaló un piso a su tía para que se instalasen sus abuelos, que vivían en Cuenca.

De ganar el proceso judicial sus hermanas, a él también le correspondería una parte del montante conseguido en la subasta, al igual que otros dos hermanos que han preferido permanecer ajenos a esta polémica. Son 5 sobrinos y todos ellos se repartirían de forma equitativa los 198.607 euros que alcanzó 'La chumbera' de Picasso en la puja.

Felipe, el hombre que ha puesto en la palestra el cisma familiar de la tata Reme, no niega que el dinero le vendría bien, pero no considera que sea justo que se condene a Lucía Bosé: "Un caramelo nunca amarga, pero creo que es una venganza de estas dos para sobornar a la familia Bosé. Ellas no tenían tanta relación con Reme como dicen, había algo de relación por ser sus sobrinas. Si mi tía viviese…, esa mujer con mi tía era como una hermana. Es vergonzoso”, sentencia Felipe, la voz que podría librar a Lucía de ser condenada a dos años de prisión, como así pide la Fiscalía contra la actriz italiana.