El rey Felipe VI vuelve a las aulas de su universidad: así ha recordado aquellos años

Felipe VI volvía a las aulas, como ya adelantaba Vanitatis en primicia la semana pasada. Ha sido entre una gran ovación, que le ha recibido 30 años después a su vuelta en la Universidad Autónoma de Madrid, donde estudió Derecho. Ha acudido sin la compañía de la Reina, que tiene actos oficiales en Galicia que le impiden acompañarle.

Esta visita del monarca era muy esperada y centenares de estudiantes de la misma facultad de Derecho en la que estudió Felipe siendo aún príncipe estaban expectantes ante su llegada para poder verle de cerca. El Rey pasó allí cinco años entre las paredes de aquellas aulas, en las que era uno más sentado en su mesa y su silla de alumno.

Don Felipe pasó por la Autónoma desde el año 1988 hasta 1993, cuando se licenció en Derecho, sacando un notable alto de media. Fue tras sus años en la universidad madrileña el primer heredero de la Corona con una licenciatura, ganándose el sobrenombre del “más preparado de la historia”.

Ahora ha querido rememorar esos 30 años que han pasado desde que se graduara en la Universidad Autónoma con este especial aniversario que seguro le trae muchos recuerdos de aquella etapa en la que era un joven mucho más tímido que ahora. Incluso quien fuera rector del centro mientras don Felipe era alumno reconocía que el monarca “ha cambiado radicalmente”.

Este jueves, 16 de marzo, los aplausos no se han hecho esperar incluso antes de la llegada del Rey en el centro. Una cálida bienvenida al soberano que no podía dejar de sonreír tímidamente al pisar la universidad que le vio crecer. Unos años que seguro fueron duros a nivel académico, pero que igualmente le habrán aportado numerosas experiencias inolvidables.

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Don Felipe siempre se sentaba en el mismo pupitre en las filas delanteras y desde allí estuvo muy atento a las explicaciones de sus profesores, siendo observado probablemente en un principio con mucha curiosidad por sus compañeros hasta que pudieron conocerle y tratarle como a un compañero más en cuanto el tiempo fue pasando y se quedó atrás la expectación surgida en los primeros días, en los que las medidas de seguridad también llamaron la atención del resto de alumnos.

De hecho, algunos de ellos supieron mucho después, incluso finalizada la carrera, que dos compañeros del aula eran, en realidad, personal de seguridad del monarca. La normalidad se fue instalando en el día a día de los estudios de don Felipe junto al resto de alumnos hasta que el Rey finalizó la carrera.

Este jueves, a su llegada, don Felipe saludaba no solo a los actuales alumnos que estudian en el mismo centro que estudió él en su día, sino también a sus antiguos profesores y al ministro de Universidad, Joan Subirats, entre otros representantes de la facultad. Poco después se dirigía hasta una de las aulas del centro y allí ha posado para la prensa con sus compañeros de estudios y sus profesores. Incluso se ha sabido que, la noche de antes, don Felipe pudo reunirse con algunos de estos compañeros, con los que cenó recordando viejos tiempos.

Tras las fotos, don Felipe se dirigió al Aula Magna Francisco Tomás y Valiente, donde ha tenido lugar el acto oficial, en el que se recordaba a todos aquellos que ya han fallecido.

De hecho, en su discurso decía: "(...) en esta ocasión tan especial y de gran significado. Treinta años después nos hemos vuelto a encontrar (también lo hicimos ayer más informalmente y con muchos que hoy no podían venir), y lo hacemos para recordar lo que vivimos en unos años que fueron muy intensos y cuyo balance es extraordinariamente positivo; para poner en valor lo aprendido de nuestros profesores, maestros, también entre compañeros; y, finalmente, para reafirmar el legado de quienes lamentablemente ya no están con nosotros".

Don Felipe se ha mostrado emocionado y aseguraba: “No puedo ocultar la enorme alegría de volver a encontrarme con vosotros —compañeros y compañeras de promoción, profesores, claustro y personal de administración y servicios de mi querida Facultad de Derecho— en este aniversario tan especial. Es alegría y es también impresión lógica de ver que la cifra nos lleva tan atrás en el tiempo; de recordar cómo éramos, lo que pensábamos sobre el futuro y sobre aquel presente, que visto desde el 2023 parece, sinceramente, de otra época”.

El Rey ha continuado explicando que “no cabe duda de que la etapa universitaria es un ‘punto de inflexión’ en la vida de cualquier estudiante, como dije en la apertura del actual curso universitario. Lo fue para nosotros. Por supuesto, también lo fue para mí, aunque tuviera un futuro… digamos que más ‘previsible”.

Don Felipe no tenía más que buenos recuerdos de aquellos años y ha confesado: “Desde el primer día de clase, aquel 18 de octubre de 1988, hasta los últimos exámenes en 1993, y que recogimos nuestro título el 26 de mayo del siguiente año, la colección de recuerdos que tengo de aquella época es valiosísima: de unos compañeros atentos, curiosos, expectantes… y también diría que comprensivos, para jóvenes de esas edades (ahora envidiables) ante unas circunstancias poco comunes... Recuerdos de un personal entregado con profesionalidad y talento al mejor servicio de las actividades docentes e investigadoras; y de unos profesores y docentes sacrificados, íntegros y rigurosos a cuyas clases y seminarios era un honor asistir”.