El original abrigo de Rania de Jordania acapara toda la atención en Japón

El rey Abdalá II, su mujer, la reina Rania, y su hijo el príncipe heredero Hussein se encuentran en Japón de visita oficial de Estado. Allí se han visto las caras (mascarilla mediante) con el actual emperador Naruhito y su esposa, la emperatriz Masako. Un encuentro que ha tenido lugar en la residencia oficial de los emperadores y que viene seguido de otros actos protagonizados en solitario por Abdalá y también por su hijo que, entre otras citas, se ha reunido con el príncipe Fumihito y la princesa Kiko de Akishino.

Sin restar importancia al resto de mujeres, Rania de Jordania ha vuelto a convertirse en protagonista a cuenta de su look. Siempre impecable y elegantísima, la reina consorte, amante de la moda y las tendencias, firma un nuevo atuendo en clave fashion.

"Fue un placer visitar hoy a sus majestades el emperador Naruhito y la emperatriz Masako en el Palacio Imperial de Tokio con su majestad y el príncipe heredero Al Hussein. Me conmovió profundamente la cálida bienvenida de sus majestades", ha escrito Rania en un post que ha subido a sus redes sociales para dejar constancia del caluroso recibimiento que su marido, su hijo y ella han recibido por parte de los soberanos japoneses.

Recuperando el tema de su atuendo, cabe destacar que el abrigo es la estrella del look. Una prenda que, curiosidades, conecta el armario de la reina de los jordanos con el de Máxima de Holanda. Firmado por Mohamed Benchellal, un diseñador holandés presente en el vestidor de la mujer del rey Guillermo, salta a la vista que el abrigo es una pieza de alta costura.

Según especifican en la cuenta de Instagram de la marca, Rania de Jordania viste el abrigo Robe Manteau. Personalizado en exclusiva para la reina consorte, se trata de un modelo confeccionado con un tejido de paño en color beis que califican de vestido. Una corriente de moda 'royal' impulsada por Kate Middleton, la de lucir un abrigo a modo de vestido, y a la que ahora dice sí la mujer de Abdalá.

De líneas rectas, son varios detalles los que destacan en el modelo creado por Mohamed Benchellal. El primero y más llamativo, el cuello voluminoso, seña de identidad en todas las colecciones que el holandés lanza al mercado. El segundo, las mangas abullonadas con pinzas en los puños. El tercero, el cierre frontal con botonadura forrada. El cuarto, los bolsillos con solapa a ambos lados. Y el quinto y último, el cinturón de piel dorada adornado con un lazo y que remata la puesta en escena de la prenda.

No podemos obviar el resto de elementos. Empezando por el bolso. Valorado en 4.800 euros, Rania de Jordania ha paseado por Japón el venerado Peekaboo de Fendi con acabado tipo rafia. Se trata de un pequeño bolso de mano fabricado en piel marrón con los bordes y el panel frontal trenzados a mano en el mismo tono. Como sello de la casa italiana, cuenta con el inconfundible cierre de giro en ambos lados.

En su muñeca, sorprende con un objeto de deseo tecnológico: el reloj Apple Watch Serie 8, un modelo de última generación con correa realizada en goma de silicona líquida en color beis a juego con el vestido-abrigo de Benchellal. A sus pies, se ha calzado unos salones básicos en tono nude acabados en punta con detalle de pulsera fina en la pala.