Subastado un icónico Range Rover 2004 que condujo la reina Isabel II
El veterano y tuneado vehículo ha sido adquirido por un comprador que superó todas las expectativas de la casa de subastas en su puja final
No hay nada como una figura royal sobrevolando una subasta para que el objeto en cuestión vea su valor aumentado de forma exponencial. Ya lo comprobamos hace tan solo unas semanas, cuando el legendario jersey de ovejas de Lady Di batió un récord millonario, superando el anterior registro en la subasta de una prenda de punto, que tenía una chaqueta de lana verde que en su día llevó Kurt Cobain. En esta ocasión ha sido un artículo bastante más voluminoso y con Isabel II como gancho el que ha saltado a los titulares.
La casa de subastas Iconic Auctioneers anunciaba el pasado mes de octubre que un objeto de lo más curioso estaría pronto a disposición del mejor postor: un Range Rover 2004 que condujo la fallecida madre de Carlos III. Su precio de salida se fijaba en 50.000 libras (unos 57.000 euros), lo que ya suponía una cantidad varias veces superior al precio habitual de un vehículo similar, pero sin pedigrí royal.
"Este Range Rover 2004 de tercera generación tuvo una dueña muy especial", rezaba el anuncio de la subasta. "Fue conducido por Su Majestad la Reina Isabel II, ofreciéndole la oportunidad de poseer una auténtica pieza de la realeza automovilística", añadía el texto, en el que se invitaba a los interesados a comprobar en persona el estado del automóvil antes de realizar sus pujas.
"Land Rover Special Vehicle Operations (SVO) suministró el ejemplar Epsom Green y lo equipó con una serie de mejoras, como un protector para mascotas obligatorio para los famosos corgis de Isabel II, una rejilla delantera modificada para mejorar la seguridad, fundas para los asientos delanteros y traseros, estribos laterales traseros y asideros para ayudar a los familiares reales a saltar a la parte trasera más fácilmente", eran otros de los atractivos de este vehículo clásico.
Sobre este Range Rover matriculado por primera vez en 2004, la casa de subastas especificaba también las dificultades a las que se habían enfrentado a la hora de certificar que, en efecto, la abuela de Harry y Guillermo se había puesto al volante del mismo. "Como ocurre con cualquier vehículo de esta naturaleza, es casi imposible conseguir un resultado. Sin embargo, se han localizado imágenes de vídeo de Su Majestad conduciendo este Range Rover en particular, con la matrícula claramente visible, lo que pone fin a las suposiciones anteriores y confirma su herencia. Se pueden solicitar copias del vídeo", se añadía como prueba de autenticidad.
Con un total de 176.000 kilómetros, se aseguraba también que estaba conservado "en excelentes condiciones", algo que parece haber convencido a un anónimo comprador que finalmente desembolsaba por el vehículo la sustanciosa cantidad de 132.750 libras (152.283 euros).
Este ha sido el segundo automóvil relacionado con la fallecida monarca que sale a la venta en los últimos meses. El pasado mes de abril se subastaba un clásico Land Rover con el que Isabel II y el duque de Edimburgo recorrieron 36 países con motivo del Jubileo de Plata de la Reina en 1977. Este coche fue propiedad del Ministerio de Defensa hasta que fue vendido en una primera subasta en abril de 1983. Desde entonces pasó a manos privadas y formó parte de una colección personal.
Del mismo modo, en noviembre de 2022 también se vendió un Jaguar X-Type station wagon de 2009 que fue propiedad de la reina Isabel por unos 50.000 euros. La royal fue conocida como la 'princesa mecánica' durante la Segunda Guerra Mundial, cuando sirvió en el ejército como mecánica y conductora, y su entusiasmo por los automóviles perduró durante el resto de su vida.
No hay nada como una figura royal sobrevolando una subasta para que el objeto en cuestión vea su valor aumentado de forma exponencial. Ya lo comprobamos hace tan solo unas semanas, cuando el legendario jersey de ovejas de Lady Di batió un récord millonario, superando el anterior registro en la subasta de una prenda de punto, que tenía una chaqueta de lana verde que en su día llevó Kurt Cobain. En esta ocasión ha sido un artículo bastante más voluminoso y con Isabel II como gancho el que ha saltado a los titulares.