El regreso triunfal de la flamante Miss Universo Catriona Gray a Filipinas

Como el famoso turrón, Catriona Gray, recién coronada mujer más bella del mundo en Tailandia, vuelve a casa. Una multitud acudió al aeropuerto de Manila para recibirla como si de una estrella del rock se tratase.

El jueves, la nueva Miss Universo participó en el reparto de regalos navideños en un orfanato organizado por la asociación Frontrow Cares. Luego se reunió con el polémico presidente Rodrigo Duterte en la Base Aérea de Villamor. Según el portavoz del Gobierno, "intercambiaron bromas" y este le agradeció "haber ganado el certamen" para el país.

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El día de su coronación, Duterte declaró que "la señorita Gray enorgulleció a todas las Filipinas cuando apareció en el escenario y mostró las cualidades que definen la belleza filipina: confianza, gracia, inteligencia y fuerza ante el desafío”.

En un vídeo publicado por la cuenta oficial de Miss Universo, Gray, de 24 años, dijo que "solo quiero agradecer a Filipinas, mi país. Ya saben, ustedes me han apoyado en todo esto y si no fuera por ustedes, no lo hubiera hecho". También dedicó unas bonitas palabras a sus padres: “Ellos son la razón por la que soy quien soy. Mi mamá y mi papá han creído en mí y en mi potencial desde que era niña. Mi papá me enseñó a ser fuerte, valiente y a dar poder a mis palabras. Mi madre me enseñó a confiar en mi intuición y a mantener un alma de fuego en un corazón amable".

Apasionada de la música –en noviembre lanzó su primer single–, cinturón negro de taekwondo y muy comprometida con causas sociales como erradicar la pobreza y combatir el sida en su país, así es Catriona Gray, que actualmente tiene una relación con el actor filipino-alemán Clint Bondad que dura ya seis años. Clint de 33 años, ha protagonizado varias comedias en el país asiático y estuvo presente en Bangkok para ver en directo la coronación de la dueña de "la nariz más bonita del universo", según escribió en su cuenta de Instagram.

La nueva Miss Universo voló el jueves por la noche a Nueva York, donde se instalará para comenzar su año de reinado con su tiara bajo el brazo y un generoso sueldo de 250.000 dólares. Además, tampoco tendrá que preocuparse por sus gastos personales como el gimnasio, la manutención, el dentista, el estilista o el vestuario porque todos esto gastos corren a cuenta de la organización.