Joaquin Phoenix, nominado al Oscar por 'Joker': sectas, hiphop y un hermano muerto
El actor siempre ha tenido fama de antipático, una actitud que está empezando a cambiar. Su complicada vida ha sido una de las razones esgrimidas por la prensa
Joaquin Phoenix ha entrado en 2020 por la puerta grande: con el Globo de Oro en la man, es el gran favorito para ganar el Oscar por su papel en 'Joker' y muchos lo dan por seguro.
Él, que nunca ha sido muy de sonreír (no como su personaje), de repente ha vuelto a redescubrir que una sonrisa no hace daño a nadie e incluso admite su legendario mal carácter.
Hace unos meses, coincidiendo con el estreno de la película, fue entrevistado por Jimmy Kimmel y reconoció haber tratado regular a unos compañeros del equipo técnico del filme. ¿A qué obedece este cambio? Durante años, preguntarle cualquier cosa era misión imposible y todo el mundo sabía que existía un tema tabú a la hora de hablar con él: la muerte de su hermano River (también actor y, como él, de los buenos).
Sus últimas entrevistas tienen un claro indicador para la prensa norteamericana: Joaquin tiene ganas de Oscar. Y esta vez parece que solo un huracán se lo impedirá: hoy por hoy es el nombre que más suena y también el protagonista de uno de los bombazos hollywoodienses de 2019 que aún colea en este nuevo año. ¿Se ha entregado el actor al mainstream? ¿Influye su propia vida en este cambio de actitud?
La excentricidad de Phoenix quizá tiene que ver con su propia infancia. Hijo de unos padres contraculturales que se unieron a Los Hijos de Dios, una secta cristiana que defendía la evangelización mediante nuevas lecturas de las Escrituras, siempre supo lo que era ir a contracorriente. Joaquin nació en Puerto Rico, durante uno de los periplos de sus padres por Sudamérica junto a la secta. El propio actor ha reconocido que pasó hambre cuando no levantaba dos palmos del suelo. De hecho, eran él y River los encargados de rascar algo de dinero para la familia tocando la guitarra. Sus padres estaban tan comprometidos con la formación religiosa que incluso pusieron a sus hijos nombres que tenían que ver la naturaleza. Por eso River (Río) se llamó River y dos de sus hermanas, Butterfly (Mariposa) o Summer (Verano).
Cuando se hartaron de comer carretera, los Bottom (el apellido Phoenix fue adoptado por la familia una vez se instaló en Estados Unidos) se mudaron a Los Ángeles. Perdidas ya todas las ilusiones relacionadas con el integrismo religioso, los padres de Joaquin pusieron todas sus energías en el talento artístico de River como actor. Era él el que parecía tener más vocación cuando para Joaquin no era más que un juego. En aquellos años, la NBC había contratado a la sra Phoenix y ella aprovechó su posición para llevar a su hijo a todos los castings de jovencitos que se hacían en la ciudad de las estrellas. Aquello dio resultado: en apenas unos años, River ya formaba parte del reparto de películas de prestigio como 'Cuenta conmigo' o 'Indiana Jones y la última cruzada'.
El éxito de River derivó en pesadilla la noche en que consumió más droga de la cuenta en el famoso Viper Room de Sunset Boulevard. El 30 de octubre de 1993, el joven y dos de sus hermanos (entre ellos el propio Joaquin) habían acudido al local donde él iba a tocar la guitarra. Los dueños se negaron a que saliese al escenario ante la enorme cantidad de gente que llenaba el Viper Room. Molesto y con bastantes estupefacientes en su cuerpo, River Phoenix se desplomó nada más salir a la calle. Su hermana quiso reanimarlo practicándole el boca a boca y Joaquin corrió a llamar a los servicios de urgencias. Nada se pudo hacer, ya que murió unas horas después.
Huraño y difícil
Desde aquel día, Joaquin nunca ha querido hablar de su hermano. Excéntrico, adorado por la crítica (sus interpretaciones en 'Two Lovers' o 'Her' se cuentan entre las mejores de este siglo) y con fama de bicho raro, poco se ha sabido de su vida privada. Eso llevó a que, cuando protagonizó el falso documental 'I'm Still Here', en el que anunciaba que dejaba el cine y lo cambiaba por el hiphop, muchos se lo creyesen. Después de todo, ¿qué es lo que el público sabía de Joaquin Phoenix? Absolutamente nada.
Los periodistas saben lo que es tratar de averiguar algún dato sobre él, aunque solo les toque hablar de cine. Durante una rueda de prensa en la Mostra de Venecia no tuvo problema en mostrar su aburrimiento, encender un cigarrillo o salir a darse un paseo al mismo tiempo que se negaba a contestar pregunta alguna. "Los actores mentimos y decimos que nuestro trabajo nos afecta emocionalmente, porque es lo que la gente quiere oír. Pero yo he rodado muchas escenas pensando: '¿Qué habrá de almuerzo en el catering?", dijo una vez.
En estos años se ha confesado vegano y ha coleccionado novias. Durante un tiempo salió con Liv Tyler, a la que conoció durante el rodaje de 'El secreto de los Abbott'. Cuando empezó a ser más popular (tras convertirse en el malvado emperador Cómodo de 'Gladiator'), tuvo como novia a la modelo Jessica Joffe y poco después hizo buenas migas con otra maniquí, Inger Lise Ebeltoft. Sin embargo, la que parece haberse quedado a su lado es otra actriz con fama de huraña, Rooney Mara. Comprometida, como él, con el cine indie y la alimentación sana, en Hollywood aseguran que las neuras son las que los mantienen unidos.
En los últimos meses, el cambio de actitud de Phoenix ha sorprendido a propios y extraños. De su odio radical a los tejemanejes de la industria y la prensa, ha pasado a servirse de ellos con gusto. Y quizá por eso también ha comenzado a hablar de su hermano. "Cuando tenía como 15 o 16 años, mi hermano River llegó a la casa después del trabajo y traía consigo un VHS de una película titulada 'Toro salvaje'. Me sentó y me hizo verla. Al día siguiente cuando desperté, me obligó a verla de nuevo. Y me dijo, ‘Vas a volver a actuar, eso es lo que vas a hacer’. No me preguntó, me lo dijo. Se lo debo a él porque actuar me ha dado una vida increíble", dijo en el pasado Festival Internacional de Toronto. Tras el discurso, quedaron claras dos cosas: si no aparece un competidor significativo, Joaquin Phoenix va a ganar el Oscar. Aunque para ello tenga que aprender a practicar algo que (al menos con la prensa) desconocía: la simpatía.
Joaquin Phoenix ha entrado en 2020 por la puerta grande: con el Globo de Oro en la man, es el gran favorito para ganar el Oscar por su papel en 'Joker' y muchos lo dan por seguro.