Lomografía: la faceta más creativa de la fotografía analógica inaugura la temporada estival
Ya está aquí el verano, temporada de piscina, playita, turismo, descanso... y fotos, muchas fotos. A estas alturas quien no dispone de una cámara dispara sus
Ya está aquí el verano, temporada de piscina, playita, turismo, descanso... y fotos, muchas fotos. A estas alturas quien no dispone de una cámara dispara sus instantáneas con el teléfono móvil o bien graba los mejores momentos de sus vacaciones en vídeo. Sin embargo, en plena era digital, aún quedan románticos que revelan sus carretes. Muchos profesionales se resisten a dejar de lado su fabuloso equipo analógico, pero también algunos aficionados prefieren optar por la calidad y, sobre todo, la estética de las fotografías tradicionales. La vertiente más creativa de estos últimos, a los que les gusta investigar y practicar con sus dispositivos, son los lomógrafos.
La filosofía de la lomografía se puede condensar en la frase "¡no pienses, dispara!". Se trata de una marca registrada por el fabricante austriaco Lomographische AG, que eligió este nombre para todo lo relacionado con una particular técnica fotográfica inspirándose en las ópticas Lomo PLC de San Petersburgo (Rusia), creadora de la mítica cámara de 35 mm Lomo LC-A, la más compacta, automática y popular de los años 80, que ha terminado asentando las bases de la actual lomografía.
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