¿Qué tipo de polvos te van? Trucos para elegirlos
El secreto de un aspecto saludable, además de las ya consabidas limpieza, hidratación y demás, es un toque de color en la cara
El secreto de un aspecto saludable, además de las ya consabidas limpieza, hidratación y demás, es un toque de color en la cara. Un polvo de sol puede proporcionarte ese efecto 'buena cara' que todas buscamos de una forma muy natural, porque nos los podemos aplicar sin base de maquillaje. Pero elegir cuál es el polvo qué más te va o diferenciar las características de cada uno no es fácil. Encontramos cuatro tipos: translúcidos, con cobertura, iridiscentes o iluminadores y bronceadores. Y dos formatos: compactos o sueltos, los primeros son mucho más fáciles de aplicar, en el día a día, que los segundos.
Para usarlos solo tendrás que elegir una brocha redonda, que te ayudará a llegar a todas las zonas del rostro o una plana, para resaltar zonas específicas.
Así que nos hemos propuesto ayudarte con unos sencillos tips que nos ha explicado la maquilladora de Natalia Belda en su libro 'Maquilla. T'. Natalia es una de las estilistas del momento. De hecho, famosas como Blanca Suárez requieren sus manos en todos los eventos y sesiones de fotos a los que van.
A nuestro objetivo 'buena cara', Natalia añade dos usos más que a veces se nos olvidan: "Ayudan a fijar el maquillaje y a matizar brillos". Su consejo previo a la aplicación es "no tener la piel muy grasa por exceso de maquillaje o productos en crema para que no se te 'claven' los polvos y puedan quedarte manchas de color por todo la cara". ¿No te ha sucedido alguna vez?
Polvos translúcidos
Perfectos para quitar los brillos de la piel, para las que quieren matar cualquier reflejo no buscado después de la base de maquillaje. Proporciona un efecto mate en las zonas en las que lo aplicas, como la frente o el mentón y donde las ojeras. "Yo en el ojo me suelo saltar la zona final donde se marcan más las arrugas, para evitar que se resalten, sobre todo en pieles maduras", comenta Natalia.
Polvos con cobertura
¿No te gustan las bases de maquillaje? Unos polvos compactos son perfectos para ti. Son los más pigmentados y tienen más textura. El objetivo de estas fórmulas es tapar las imperfecciones de la piel, unificar el tono y matizar.
Polvos iluminadores
Estas últimas temporadas que se ha llevado ese efecto gloss en la piel, estos han sido los aliados de todas las influencers. Aportan brillo a la piel y también te pueden servir para iluminar algunas zonas.
Polvos bronceadores
"Son polvos marrones para dar color. Se pueden utilizar en todo el rostro para conseguir el efecto de piel bronceada", cuenta Belda. Son perfectos también para remarcar algunas zonas del rostro.
El secreto de un aspecto saludable, además de las ya consabidas limpieza, hidratación y demás, es un toque de color en la cara. Un polvo de sol puede proporcionarte ese efecto 'buena cara' que todas buscamos de una forma muy natural, porque nos los podemos aplicar sin base de maquillaje. Pero elegir cuál es el polvo qué más te va o diferenciar las características de cada uno no es fácil. Encontramos cuatro tipos: translúcidos, con cobertura, iridiscentes o iluminadores y bronceadores. Y dos formatos: compactos o sueltos, los primeros son mucho más fáciles de aplicar, en el día a día, que los segundos.
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