Por qué le vimos la piel tan luminosa a Leonor y cómo imitar su maquillaje

Prácticamente rozando la mayoría de edad, la princesa Leonor parece haber encontrado su estética beauty. Su espectacular melena rubio ceniza, cuidada y con un envidiable volumen es su gran aliada para construir looks formales a la par que juveniles.

Sin embargo, dejando a un lado la forma de moldear su melena, en la última aparición de la Princesa, una superpiel, luminosa e impoluta era la verdadera protagonista desde el plano de la belleza. El resto de la atención recaía en sus labios, más prominentes de lo habitual, y no solo como consecuencia de la presencia de la ortodoncia bajo ellos.

No nos encontrábamos ante un maquillaje muy recargado, sino más bien todo lo contrario, la clave de su impacto era la naturalidad. Su piel estaba sublimada, ese concepto con el que resumimos esa sensación de piel elevada a la máxima potencia de su belleza. Si los días previos veíamos cómo alguna imperfección era cubierta con corrector o las mejillas se resaltaban con un toque de rubor rosado, en el nocturno look de la Princesa de Asturias la piel lucía de una forma radicalmente diferente.

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¿Era cosa de una base mate frente a una base jugosa? Podría ser una explicación, pero Roberto Siguero, National Makeup Artist de Lancôme, con el que hemos repasado los últimos looks de la princesa Leonor, nos asegura que el fondo de maquillaje es el mismo, la magia está en los polvos de sol. El maquillaje que lució en los premios se caracteriza por el uso de los polvos de sol, realizando un sutil contouring con el que se resaltan ligeramente los pómulos. “El juego de claroscuros realza las zonas más claras, creando la sensación de un rostro más luminoso”, explica Siguero.

El equipo de maquillaje responsable del look de la Princesa recurría a uno de los trucos habituales de la reina Letizia, el uso de un sutil tono bronceado para iluminar y calidecer el rostro. En el caso de Leonor, cuya forma del rostro es redondeada, además de lograr un efecto contouring, esculpiendo sus facciones, los polvos de sol también han creado un contraste con el tono de su piel, de tal modo que el rostro resplandecía.

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El efecto de un cambio en el maquillaje de Leonor respecto a los días anteriores podría responder, según el experto, a que los maquillajes de día podrían estar incluso realizados por ella misma, debido a su sencillez, mientras que el look nocturno saldría de las manos y brochas de un maquillador profesional. El maquillador también apunta a otro factor que habíamos pasado por alto, la evidente presencia de focos de luz presentes en la entrega de los Premios Princesa de Asturias. La incidencia de su potente luz sobre el rostro de Leonor potenciaría el efecto de luminosidad.

Aunque la piel pueda llevar tanto en los looks de día como en los de noche la misma base, el maquillador habla de una piel preparada con un sérum tipo Génifique de Lancôme, capaz de aportar esa luminosidad y mantenerla hidratada todo el día, de una forma tremendamente natural.

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La indudable luminosidad del rostro de la primogénita de los Reyes no queda, sin embargo, justificada únicamente con la preparación o el maquillaje de la piel. El resto del rostro está aderezado en la misma dirección, como señala Roberto Siguero. Todo el párpado móvil parece estar maquillado con una sombra de ojos de un color natural, en acabado irisado, mientras la cuenca se marca con una sombra neutra y mate, describe el maquillador. El iluminador en el lagrimal también se ha convertido en uno de sus trucos de maquillaje predilectos.

Los comentados labios de Leonor

Habituada a tan solo maquillar sus labios con un ligero tinte rosa o una generosa capa de bálsamo labial, cuando la Princesa apareció con los labios realzados en un color algo más opaco, su rostro cambió por completo, dotado de un halo más adulto. La definición de sus labios, así como su volumen, despertaron las dudas sobre cómo se había conseguido realzar de tal forma su boca. La respuesta, como especifica el National Makeup Artist de Lancôme, está en su maquillaje.

Los labios de la heredera están perfilados con un lápiz de color más oscuro que el tono del resto del labio; es más, se trata de un degradado muy bien realizado, como apunta el maquillador. “Se aprecia un color más oscuro en los extremos y más claro en el centro del labio”, precisa. Es así como se logra jugar con los volúmenes, consiguiendo el efecto óptico del centro y cúspide de los labios más prominentes.