De los besos de Madonna a los coros de góspel: un resumen de lo mejor de la NYFW
Repasamos los momentos más icónicos de la pasarela neoyorquina que han acontecido esta semana. Aquí todos los detalles imprescindibles
La Semana de la Moda de Nueva York ha llegado a su fin dejando tras de sí un sinfín de desfiles en los que las celebridades han tenido un papel (casi) tan destacado como la moda. El regreso a las pasarelas ha demostrado que un buen front row es tan importante como un gran desfile, y de ahí la presencia de celebs de la talla de Madonna, Katie Holmes, Anne Hathaway y, cómo no, la omnipresente Anna Wintour, que comprueba temporada tras temporada tras sus inseparables gafas de sol que el espectáculo sigue 'in crescendo' y que en las fashion weeks importa tanto dar titulares y ser visto como ver. A ella no le sorprende que a las 10 de la mañana las asistentes al desfile de Carolina Herrera aparezcan vestidas con tules, y tampoco estar sentada al lado de Lil Nas X y que el rapero se levante de su sitio y se ponga a cantar sobre la pasarela.
Uno de los desfiles más comentados ha sido el de Fendi, en cuyo front row vimos a Sarah Jessica Parker junto a Kim Kardashian, que tomaron notas de las propuestas de la marca y alabaron sus atuendos, un clásico de cualquier evento de moda. Las propuestas llevaban el sello de dos pesos pesados de la moda, Kim Jones y Marc Jacobs, que no solo son amigos, sino que ya trabajaron anteriormente juntos cuando Jacobs estaba al frente de Vuitton y Jones se encargó de los diseños de hombre de la marca. Los diseñadores se han encargado de reinterpretar el mítico diseño Baguette que Carrie Bradshaw popularizó en el capítulo 17 de la tercera temporada de ‘Sex and the City’, pero esa no fue la única sorpresa del desfile, pues la firma ha colaborado con Tiffany & Co.
Linda Evangelista regresó a la pasarela para la marca, de la que es imagen, y se convirtió en la indiscutible protagonista.
Stuart Vevers rindió homenaje en su desfile de Coach (cuyo nuevo embajador es Lil Nas X) a los neoyorquinos que viajan en verano entre las playas de Coney Island y Rockaway, mientras que Wes Gordon enamoró a la crítica especializada con su particular jardín floral para Carolina Herrera.
El diseñador ha logrado que sus creaciones, exentas de rarezas y extravagancias, no resulten nunca aburridas, y en esta ocasión no se ha ceñido únicamente al código 'red carpet' sino que ha presentado algunos diseños más cercanos al día.
Gabriela Hearst llevó a los miembros del coro de gospel Resistance Revival Choir a la semana de la moda para cantar ‘This Joy’ en un desfile en el que mujeres de edad avanzada ajenas a la moda mostraron las creaciones de la uruguaya, que comenzaron con pinceladas doradas y que derivaron en coloridos trajes y algunos de los vestidos característicos de la firma.
¿El titular para los medios españoles? Leiva desfiló para la marca de su amiga.
El desfile de Marni también deparó sorpresas. Su director creativo, Francesco Risso, tocó el violonchelo a lo largo del show junto al resto de los músicos. Sí, estamos aquí para hablar de moda, pero… ¿Cómo no vamos a comentar el morreo inesperado en pleno desfile, desde el front row, de Madonna y Tokischa?
Tommy Hilfiger presentó el nuevo monograma TH, creado en colaboración con el ilustrador y diseñador gráfico Fergus Purcell, que ofrece una nueva versión del estilo preppy moderno. Las innovaciones digitales sumergieron a las audiencias físicas en un desfile experiencial en el multiverso, mientras que la retransmisión en vivo para las audiencias globales mezcló el desfile físico con el del mundo virtual y con avatares de estrellas de Superplastic.
“Como un regreso a nuestro corazón más creativo, este otoño 2022 rendimos homenaje a la icónica NYC factory de Andy Warhol, donde reunía moda, arte, música y entretenimiento. Desde nuestro nuevo TH Monogram diseñado en colaboración con Fergus Purcell hasta nuestra colaboración más rompedora con el diseñador británico, Richard Quinn, este otoño queremos fusionar lo clásico y lo nuevo para anunciar lo que viene después, mezclando los códigos tradicionales estadounidenses con un toque contemporáneo inspirado en la moda urbana, y combinando colores pop llamativos, reinventando las proporciones y rediseñando clásicos de formas inesperadas. El estilo preppy moderno es para todos. Una celebración inclusiva de la cultura y creatividad pop en los mundos real y virtual, eso es Tommy Factory”, explicó el diseñador.
Michael Kors ha querido democratizar la Semana de la Moda de Nueva York al hacer a las modelos desfilar también por las afueras del edificio ante un entregado público que no dudó en aplaudir con especial emoción a Bella y Gigi Hadid. El desfile supuso la yuxtaposición del espíritu urbanita de la ciudad de Nueva York y el espíritu vacacional de los resorts.
El encargado de cerrar la Semana de la Moda de Nueva York fue Tom Ford, que ofreció la clausura perfecta con un desfile de alma disco al que no faltaron figuras como Nicola Peltz, Brooklyn Bekcham y Lila Moss. La sostenibilidad ha sido clave en marcas como Hearst y Coach, pero precisamente, al finalizar la semana, Kourtney Kardashian se encargaba de presentar su controvertida colección para Boohoo, firma de la que es embajadora de sostenibilidad.
¿Que cómo demonios puede una marca 'fast fashion' ser sostenible? Ni siquiera ella lo sabe, pues ante la polémica desatada se ha visto obligada a hacer un comunicado en el que invita a los expertos a enviarle mensajes e ideas para empujar a la marca hacia la sostenibilidad. El desfile capturó la tensión a la perfección, pues las luces se fueron y los invitados tuvieron que iluminar la pasarela con sus móviles para que las modelos pudieran presentar los diseños…
La Semana de la Moda de Nueva York ha llegado a su fin dejando tras de sí un sinfín de desfiles en los que las celebridades han tenido un papel (casi) tan destacado como la moda. El regreso a las pasarelas ha demostrado que un buen front row es tan importante como un gran desfile, y de ahí la presencia de celebs de la talla de Madonna, Katie Holmes, Anne Hathaway y, cómo no, la omnipresente Anna Wintour, que comprueba temporada tras temporada tras sus inseparables gafas de sol que el espectáculo sigue 'in crescendo' y que en las fashion weeks importa tanto dar titulares y ser visto como ver. A ella no le sorprende que a las 10 de la mañana las asistentes al desfile de Carolina Herrera aparezcan vestidas con tules, y tampoco estar sentada al lado de Lil Nas X y que el rapero se levante de su sitio y se ponga a cantar sobre la pasarela.