Lily-Rose Depp rescata un minivestido de Chanel de los 90 para brillar en Cannes

Las celebridades siguen llegando al Festival de Cine de Cannes. Españolas como Paz Vega, Amaia Salamanca o Claudia Bouza, e internacionales de la talla de Carlota Casiraghi, Cate Blanchett y Jennifer Lawrence. ¿Consecuencia? Un ritmo frenético sobre la alfombra roja que nos deja un porrón de looks que quedarán para el recuerdo. Para engordar ese histórico de estilismos inolvidables, la actriz Natalie Portman, enfundada en el mítico vestido Junon que Christian Dior creó en 1949, o la influencer y modelo Marta Lozano, con un diseño bicolor de Atelier Pronovias.

Ese ademán de moda que consiste en recuperar modelos de archivos, tan expandido en las alfombras rojas de todo el mundo y, en este caso concreto, abanderado en la ciudad de la Costa Azul por la protagonista de 'Cisne negro', siguió adelante con la llegada de Lily-Rose Depp. La hija de Johnny Depp y Vanessa Paradis desembarcó en el certamen cinematográfico luciendo un minivestido vintage.

El motivo de su presencia en el Festival de Cine de Cannes era presentar 'The Idol', la serie de la HBO que coprotagoniza junto a Abel Makkonen Tesfaye, el vocalista de The Weeknd, y que ha sido concebida por Sam Levinson, el responsable de la mediática 'Euphoria'. Acompañada de ambos, derrochó estilazo y personalidad gracias a su atuendo.

Teniendo en cuenta que es embajadora y musa de Chanel, no era de extrañar que la maison estuviese detrás de sus looks para pisar la 'red carpet'. La sorpresa nos la hemos llevado al estudiar el estilismo y comprobar que, firmado por la marca francesa, era un modelo de la década de los 90.

Se trata de un minivestido que desfiló en la Semana de la Moda de París en 1994. Con Karl Lagerfeld al frente de la dirección creativa de la casa de moda francesa, la colección otoño-invierno de aquel año incluía varios atuendos de fiesta. Supermodelos como Claudia Schiffer, Helena Christensen y Christy Turlington, esta última la encargada de llevar el vestido que Lily-Rose Depp ha recuperado de los archivos.

De escote palabra de honor, ajustado en la cintura y falda corta evasé, es el tejido lo más llamativo. Bordado con lentejuelas negras en tamaño XS por todo el corte, cuenta con unos botones en la parte frontal, lazo negro de raso y el sello inconfundible de Chanel, una camelia en tonos verdes y azules en el centro del escote.

Si en 1994 Christy Turlington lo acompañó de unos guantes transparentes y medias en el mismo tejido, la actriz ha replicado tal cual el look para brillar en la alfombra roja de Cannes. La diferencia la marca el peinado, de la melena midi suelta con diadema de flores de la modelo a un recogido informal con mechones caídos por el rostro. A sus pies, unos salones negros.

Después de pasear el vestido vintage, Lily-Rose Depp y todo el equipo de la serie cambiaron de escenario y de estilismos para asistir a una de las fiestas posteriores al visionado oficial de las películas.

También de la maison francesa, pero parte de la colección crucero que presentó hace unas semanas en Los Ángeles, la hija de Johnny Depp y Vanessa Paradis repitió la fórmula: un vestido corto repleto de paillettes matealizados con efecto degradé. De silueta sencilla, bien pegada al cuerpo, con tirantes anchos y escote recto, la joven actriz estaba radiante con el segundo look de Chanel en Cannes.

Una tendencia de moda con fondo sostenible, la de recuperar prendas del pasado, traerlas al presente y, solo por ese motivo, causar sensación, que cada vez aplican más celebrities para acudir a fiestas y eventos y que, parece ser, llegó hace un par de temporadas para quedarse instalada en sus vidas y en las nuestras.