Las mejores vacaciones en el hotel más cool de Marbella: lujo, gastronomía, relax y arte

Llega el momento de desconectar, olvidarse de las notificaciones del móvil, los atascos y del reloj. Lo hacemos en un enclave único entre colinas salpicadas de jacarandas y cipreses, con una oferta gastronómica repleta de restaurantes de lujo para todos los gustos. Rodeado por impresionantes jardines, Anantara Spa, uno de los más grandes de Europa, cuenta con más de 2.000 metros cuadrados de termas romanas y baños turcos, un circuito aromático -la única instalación de este tipo en la Costa del Sol-, 13 salas de tratamientos y un salón de belleza donde relajarse y fomentar el bienestar integral.

Todo esto nos espera en el Anantara Villa Padierna Marbella de 5 estrellas, el espacio perfecto para disfrutar de las vacaciones con los cinco sentidos. La vista, el gusto, el olfato, el tacto y el oído… todo el cuerpo se dejará seducir por los encantos de resort de aire palaciego de la Costa del Sol. Ubicado entre Marbella, Benahavís y Estepona, su situación lo convierte en el punto base ideal para conocer todo su entorno. Aunque una vez hayas descubierto todas las posibilidades de este hotel lo más probable es que no quieras salir.

Su deliciosa oferta gastronómica

Un resort convertido casi en museo que también invita a mirar al exterior. Las vistas panorámicas a los tres campos de golf, al Mediterráneo y a su piscina interior son una delicia. Aunque si hablamos del gusto, debemos hablar de su gran oferta gastronómica gracias a 10 restaurantes con personalidad propia que recorren todos los rincones del mundo.

Entre ellos destacan La Veranda, el restaurante del hotel que, gracias a la propuesta de José Carlos Delgado Serrano, ofrece recetas clásicas con un toque moderno, brindando una experiencia culinaria única en la que destacan el tartar de atún rojo o las crepes suzette como protagonistas. Con unas vistas espectaculares frente al lago y el Peñón de Gibraltar, el restaurante La Loggia ofrece platos malagueños durante la hora de la comida y especialidades italianas en la cena.

La oferta gastronómica italiana se completa con la propuesta del restaurante Viva Italia y si lo que quieres es trasladarte a Japón, te recomendamos 99 Sushi bar & restaurant con una propuesta contemporánea, fresca y original con platos clásicos de la cocina tradicional nipona y creaciones más vanguardistas e innovadoras.

Mientras, Hole 55, es perfecto para relajarse y disfrutar de auténticos tentempiés típicos andaluces. Aunque, si deseas sentir que estás lejos del mundanal ruido, la terraza de Eddy's Bar es el escenario perfecto con sus vistas sobre el mar. Unas opciones gastro, entre las que también destaca Irene's Health Kitchen u Olà Beirut, el libanés recién incorporado a su cartera de restaurantes.

Sin embargo, estando en la costa malagueña, es imprescindible visitar el Beach Club ‘By the Sea’ del Villa Padierna. Una parada obligatoria para los amantes del pescado y marisco, donde el producto estrella son los espetos. El rey de reyes en los veranos malagueños que conquista a nacionales y a extranjeros.

Este resort rodeado de verde corrobora que el lujo se puede sentir por fuera, pero también por dentro porque, ¿lo oyes? Es el silencio que rodea a sus jardines, su spa y sus zonas acuáticas. Una prueba más de como la calma que produce el rumor del agua es el sonido perfecto para el verano. No dejamos desatendido el sentido de la vista, porque pasear por sus habitaciones o sus villas es una experiencia artística poco habitual.

Si nos dejamos llevar ahora por el tacto, las cuidadas habitaciones y villas de este hotel-museo son un placer. Un santuario donde la riqueza de su decoración o la calidad de sus tejidos imprime ese sello de calidad de un alojamiento 5 estrellas. Aunque, no todo va a ser relajación, porque los más deportistas también pueden sentir la adrenalina de la competición en sus campos de golf, en la pista de tenis o de croquet.

El aroma de lo exquisito

Finalmente, pero no por ello menos importante, destacar los aromas que se funden en este alojamiento a los pies del Mediterráneo. Del olor a mar, con su refrescante toque salado, al verdor que emanan los cipreses o las notas más exóticas de los aceites esenciales que se usan en el circuito aromático del Amarante Spa, todo se funde en un perfume natural que nos invita a tener el verano más memorable.

Un enclave privilegiado, una naturaleza única, un servicio muy cuidado y todo tipo de atenciones a los que se suman su entorno cosmopolita. Si se desea más ajetreo o bullicio, espacios como Puerto Banús está muy cercanos, por lo que se puede combinar lo mejor de ambos mundos.

El Anantara Villa Padierna Marbella es un punto de encuentro para los visitantes de la Costa del Sol que sepan valorar los pequeños placeres de la vida, por todos sus sentidos, y en todo su esplendor.