Vicky Fumadó, íntima de la infanta Cristina y referente del coronavirus

Eran más que amigas porque cuando la infanta Cristina decidió vivir en Barcelona buscó en la ciudad a su segunda familia. Y la encontró en personas como Vicky Fumadó, con quien compartía su pasión por navegar y con quien compitió para participar en los Juegos Olímpicos de Seúl. Ahora, la hermana del Rey ve cómo su vida se desmorona durante un tiempo por la llegada del coronavirus, cuya cuarentena ha confinado a Iñaki Urdangarin y todos los presos de España en las cárceles.

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Mientras, su gran amiga, casi hermana, se ha convertido en una de las voces más autorizadas sobre la materia. Porque Fumadó es pediatra especializada en enfermedades infecciosas y responsable de este servicio en el hospital San Juan de Dios, el infantil más prestigioso de Cataluña y uno de los mejores de España. Fumadó es además investigadora asociada de ISGlobal, entidad dependiente de la Obra Social La Caixa, donde ha trabajado la Infanta en las últimas décadas.

Las recomendaciones de Fumadó corren estos días como la pólvora por los chats de Whatsapp. Tanto de padres como de gente perdida que no sabe cómo afrontar la cuarentena por el coronavirus. Desde el hospital, recomiendan los escritos de Fumadó sobre la pandemia e incluso ofrecen su contacto para consultarle los casos más graves. “Resuelve las principales dudas sobre el brote del nuevo coronavirus (COVID-19), la doctora Vicky Fumadó -escriben-, especialista de la Unidad de Enfermedades Infecciosas e Importadas del hospital, da respuesta a los principales aspectos del actual brote de este virus”.

Regatista a los 13 años

Casada desde hace décadas con un oncólogo, Fumadó tiene dos hijos mayores, Jacobo y Eva. Esta eminencia médica, seis años mayor que Cristina de Borbón, empezó a practicar la vela a los 13 años mientras veraneaba en Cabrera de Mar. “He compaginado mi vida con el deporte”, contaba hace décadas en una de las pocas entrevistas que ha dado en su vida, al periodista Albert Montagut en 'El País'. “Y he entregado casi todo por la vela, y ahora voy a intentar compaginarlo todo para intentar ayudar a estos niños y explicarles que ellos también pueden hacerlo”, decía sobre sus planes de futuro como pediatra.

Fumadó fue una de las personas que ayudó a la Infanta a buscar su primer piso en Barcelona, situado en la calle Eduardo Conde, en la frontera entre Pedralbes y Sarriá. Y también fue testigo de su boda. “La vela me ha costado muchísimos sacrificios, y el principal es el no poder estar con mis hijos siempre que quiero”, decía Fumadó en la citada entrevista. “La no clasificación para Seúl me permitirá un receso que me servirá para programar el futuro inmediato”, añadía.

Participó como reserva

La infanta Cristina y Vicky Fumadó no pudieron superar la fase de clasificación para los Juegos, pero finalmente la hermana de Felipe VI participó por una indisposición de un compañero, tal y como relata la crónica de 'Mundo Deportivo' de aquellos días. Porque la actuación de la pareja sirvió para que la Infanta participara como reserva del equipo español que acudió a los Juegos coreanos. Mimí González y Patricia Guerra eran dos de las otras participantes en la regata.

“Durante toda la competición supimos que no íbamos a ganar, pero lo pasamos muy bien y disfrutamos mucho navegando juntas”, contaba Fumadó. “Creo que se lo ha merecido, porque ha dado mucho de sí para conseguir ser olímpica”, dijo la amiga de doña Cristina, a quien calificó de “deportista tenaz”. “En todo momento sabe cómo comportarse, independientemente del ambiente en el que estemos, y yo considero que para una persona de su posición y edad esa cualidad es muy importante”.

"La Infanta sabe llevar un barco, y muy bien. Formamos un equipo. Naturalmente, entre las dos no sumamos el mismo número de horas en competición o de entrenamiento y puesta a punto que otros competidores. Le aseguro que procuraremos conseguirlas para obtener la mejora que ya vamos notando paulatinamente. Lo nuestro es un equipo y yo no lo variaría por nada ni por nadie", decía en un encuentro con la prensa antes de aquellos juegos olímpicos.

Todoterreno

Ya casada y con dos hijos, Fumadó terminó la carrera de Medicina, cuatro cursos de seminarios para el doctorado y empezó a trabajar en su tesis. Todo, mientras entrenaba para los Juegos de Seúl. Su carrera médica empezó con su padre, Antonio Fumadó Esteve, entonces jefe de los Servicios Pediátricos del hospital San Juan de Dios. "Quizás el secreto está en que necesito dormir muy poco, media docenita escasa de horas", declaraba en aquella época.

Diplomática y discreta, nunca quiere hacer declaraciones sobre su amiga. Ahora ha salido en público para ayudar a la población, necesitada de consejos y pautas para mantener esta cuarentena que afecta a todos, incluso a los miembros de la Casa Real.