Rafa Nadal se sincera sobre su papel de padre y su futuro en el tenis

Tras más de 18 años juntos y casi tres de casados, Rafa Nadal y Xisca Perelló daban la bienvenida al mundo el pasado 8 de octubre a su primer hijo en una clínica de Palma de Mallorca. El tenista, ganador de 22 títulos de Grand Slams, pudo estar presente en el nacimiento del bebé, ya que se encontraba preparando en su academia de Manacor su regreso a las pistas en el Masters 1.000 de París-Bercy.

"Hay cosas más importantes que debo atender", declaraba el deportista poco antes, tras quedar eliminado en Nueva York, en referencia a la relevancia superior de su faceta de padre, de la que ya había hablado en numerosas ocasiones en el pasado.

Ha sido en la capital francesa donde, después de más de 40 días sin competir tras su último partido de dobles junto a Roger Federer con motivo de la retirada del suizo, Rafa Nadal volvía a coger la raqueta y, de paso, nos dejaba unas bonitas palabras sobre su retoño.

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En una rueda de prensa previa al partido, el tenista aseguraba que le había resultado "difícil salir de casa" para disputar su primer torneo como padre primerizo, lejos de su familia y su hogar.

Aunque el mallorquín se mostraba feliz por no tener lesiones y ser capaz de volver a la pista en el último evento ATP Masters 1000 de la temporada, confesó que ha tenido que adoptar un "enfoque diferente" en esta ocasión. "Es curioso que ya le eche de menos conociéndole desde hace apenas tres semanas", expresó de forma emotiva sobre su hijo el número 2 de la ATP.

Aunque había afirmado que no esperaba que la paternidad alterase su faceta profesional, ahora acepta que las cosas sí se han trastocado: "Como todos los cambios en la vida, es algo complicado, pero afortunadamente vivimos rodeados de tecnología y podemos hacer videollamadas en cualquier momento", añadió con unas palabras que habrán hecho identificarse con él a numerosos padres.

Las primeras palabras de Rafa Nadal tras convertirse en padre de su primer hijo

H. Tomás

Paternidad aparte, Rafa Nadal también nos sorprendía con la rotundidad con la que afronta su futuro en el tenis. "Que quede una cosa clara, ya no lucho para ser número 1, solo lucho para ser competitivo en todos los eventos que disputo, hace tiempo que luchaba para serlo y ya lo logré", fue su contundente sentencia.

Por desgracia para ese futuro en las pistas, pero afortunadamente para la conciliación familiar, Nadal se veía obligado a abandonar a las primeras de cambio el torneo parisino al caer derrotado ante Tommy Paul. Tras el partido, el manacorí daba una de sus habituales lecciones de humildad.

"Han pasado muchas cosas en los últimos meses. Pero siempre estamos dispuestos a encontrar excusas, cuando al final, siempre es lo mismo: juegas bien, ganas; no lo haces, pierdes. Y este miércoles estaba jugando bastante bien, pero en el momento adecuado no hice las cosas correctas y él jugó muy bien", fueron sus celebradas palabras.