Enrique Ponce hipoteca parte de su patrimonio y pone en orden su fortuna

Enrique Ponce y Ana Soria han sorprendido con su decisión de sentarse con Pablo Motos esta noche en 'El hormiguero'. En la información facilitada por el programa, avanzan que Ponce se sienta por primera vez en un plató con su pareja, Ana Soria, para hablar "de cómo se conocieron y dejar claro, de primera mano, los pasos que dieron en su mediática relación sentimental". Tras haber peleado por mantener su privacidad al margen de la curiosidad pública, este movimiento ha sido interpretado por algunos como un primer paso hacia una futura carrera televisiva del torero.

Pablo Motos se ha llevado el gato al agua de una entrevista esperada desde hace tres años por todos los medios de la prensa social. ¿Una cuestión de amistad? "Enrique Ponce y Pablo Motos se conocen, pero desde hace poco", matizan desde el entorno del presentador. A principios de mayo, tal y como publicó la revista 'Semana', Ponce y Ana Soria aprovecharon una escapada a Madrid para quedar con Motos y su mujer a comer. También vieron un partido entre el Real Madrid y el Almería. Parece que fue en ese momento cuando cerraron los detalles de la esperada entrevista que tendrá lugar esta noche.

En junio de 2021, el maestro comunicó por sorpresa que abandonaba las plazas de toros y desde entonces ha mantenido un perfil muy bajo a nivel mediático: "A quienes durante más de tres décadas me han acompañado, lo primero que quiero es daros las gracias por el cariño y apoyo incondicional, en especial en este último año de pandemia en el que decidí defender la tauromaquia, tirar para adelante y devolverle al mundo del toro lo mucho que me ha dado. En este momento de mi temporada taurina 2021 he decidido hacer un alto en el camino y retirarme por tiempo indefinido".

En este tiempo, el torero no ha estado de brazos cruzados. Por un lado, ha seguido vinculado a la fiesta con distintas actividades. Este fin de semana recibió en Cetrina a la escuela de tauromaquia de Cataluña. Tal y como avanza 'Mundotoro', el de Chiva encerró tres vacas para los alumnos y les dirigió desde el punto de vista técnico. Después todos se tomaron una paella valenciana y alargaron la sobremesa hablando de toros.

Decisiones dolorosas

Pero, además de esto, durante este tiempo el maestro valenciano ha estado poniendo en orden sus finanzas después del divorcio de Paloma Cuevas. Se ha deshecho de algunas propiedades, ha tomado decisiones dolorosas y ha emprendido algunos proyectos que le ilusionan, como la casa en Almería que compró junto a Ana Soria.

Durante los años en que estuvo en activo, los asuntos económicos del torero estuvieron en manos de su hermano y de su representante. A lo largo de su carrera, el torero invirtió el dinero que ganó en los ruedos en distintos negocios que no siempre salieron bien. El que mejor funcionó siempre es la gestión de alquileres, a través de la empresa C P M Building. Mediante esta entidad, Ponce era propietario de varios locales comerciales y naves en Úbeda, Villacarrillo, Torremolinos o Fuengirola que alquilaba a otros empresarios. Su otra gran actividad empresarial se centró en la explotación agrícola y ganadera de su gran finca de Jaén, la Cetrina.

A día de hoy, el torero sigue teniendo un gran local a escasos metros del paseo marítimo de Fuengirola que busca inquilino; un piso de más de 380 metros cuadrados en la zona de Pintor Rosales (Madrid); una nave en Villanueva del Arzobispo, y la Cetrina, que sigue siendo la joya de la corona de su patrimonio inmobiliario. Se trata de una buena cartera que asegura su futuro y el de los suyos, aunque, entre 2020 y finales de 2022, el maestro ha tenido que pedir varias hipotecas millonarias de las que responden estas propiedades para poner en orden sus asuntos económicos. En los últimos años, Ponce se ha encontrado con algún embargo instado por deudas a la Seguridad Social, sustos ya solucionados. Algunas de estas fincas ya habían sido hipotecadas en 2017.

Cuando se retiró, Enrique Ponce era uno de los mejores toreros del escalafón. Llevaba tres décadas jugándose la vida en los ruedos en España y en América. "Su estética (siempre tan importante en el toreo), su técnica y su saber de toros han sido de lo mejor", afirma un experto taurino. Sin embargo, el buen hacer que demostró en las plazas no se dejó ver en su faceta como empresario. Más allá de las socorridas inversiones inmobiliarias, no ha tenido demasiada suerte con las iniciativas que ha puesto en marcha, como le ocurrió hace años con 'Crisol'.

La Cetrina

En 2017, el torero puso en marcha este espectáculo, mezcla de diversas artes y fruto de su pasión por la música y el toreo. Su ambición era llevarlo por diversas ciudades españolas. "Queremos hacer algo a través de músicas más líricas y de bandas sonoras de películas y adaptarlo a una corrida de toros", explicaba el torero valenciano en rueda de prensa. Sin embargo, la cosa no salió bien.

Tampoco ha tenido suerte cuando ha intentado rentabilizar la fabulosa finca Cetrina, cientos de hectáreas en Jaén donde ha elaborado aceite gourmet entre otras cosas. Hoy la empresa que gestiona la finca declara un patrimonio negativo de 850.000 euros. "El olivar de Enrique Ponce se extiende en las fincas de Cetrina y Avenzas, las dos muy cercanas, en el término municipal de Navas de San Juan. En las 400 hectáreas destinadas a este cultivo intensivo crecen 53.000 árboles. Aceite de cosecha temprana, fruto de aceitunas picual recogidas a finales del mes de octubre [...]. La variedad picual tiene carácter, es potente. Y el aceite de Enrique Ponce, según su productor, tiene aroma, sabor y color peculiares. Ese rasgo picante característico de la picual se matiza, y nos queda un aceite afrutado, que huele a zumo de aceitunas. Un aceite con personalidad muy mimado", se podía leer en la publicidad.

La entidad acaba de dar de baja la marca con la que comercializaban este oro líquido. Es hora de empezar de nuevo.