Francina Armengol, nueva presidenta del Congreso: cooperación, familia y polémicas

Su nombre completo es Francesca Lluc Armengol Socías, pero a lo largo de su ya dilatada carrera política la conocemos como Francina Armengol a secas. Nacida hace 52 años en la localidad mallorquina de Inca, de la que su padre fue alcalde, ha seguido los pasos de su progenitor tanto en su faceta de política como en la de su primera profesión, la de farmacéutica. Ahora, después de ocho años al frente del Gobierno socialista de las Islas Baleares, su nuevo gran paso ha sido sustituir a Meritxell Batet como presidenta del Congreso de los Diputados.

"Francina Armengol es una política cercana a la realidad cotidiana de los ciudadanos, representa la lucha por la igualdad de las mujeres, la justicia social y la apuesta por la convivencia basada en el diálogo", aseguraba el PSOE al proponerla como candidata como apuesta de Pedro Sánchez.

La expresidenta de Baleares se mostraba "muy emocionada y agradecida" por ser la candidata propuesta. "Muy emocionada y agradecida por la confianza de mi partido @psoe y nuestro secretario general @sanchezcastejon. La ciudadanía está esperando que podamos emprender una legislatura de diálogo, trabajo y consensos. Estamos en la política para solucionar los problemas de la gente, para transformar la sociedad y para avanzar hacia un futuro mejor", aseguraba en su cuenta de Twitter. Finalmente la socialista ha sido elegida con mayoría absoluta tras conseguir en el último momento el apoyo del partido de Puigdemont y de ER.

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Tras militar de joven en un sindicato independentista mientras cursaba sus estudios universitarios en Barcelona y afiliada desde los años noventa al partido socialista de las Islas Baleares, Armengol ha desarrollado su labor en las principales administraciones: concejal en el Ayuntamiento de Inca en sus inicios, diputada después en el Parlament de las Baleares, miembro del Consejo Insular de Mallorca, diputada en el Congreso de los Diputados para finalmente convertirse en la primer mujer presidenta de la Comunidad Autónoma en 2015, cargo que revalidó en 2019.

Se reconoce una enamorada de su tierra, que ha defendido siempre a capa y espada, y de su gastronomía, especialmente del frito y las sopas. Demostrando su carácter solidario y su vocación de cooperante, hace 10 años amadrinó a dos niños saharauis de 11 años de edad. Dado que el tema le toca muy de cerca, no ha dudado en hablar alto y claro para apoyar al pueblo saharaui y expresar su "agradecimiento infinito" a las familias acogedoras de Baleares. Así lo hacía en un acto celebrado en 2022 en el que aseguraba que sus gentes están "sometidas de manera injusta" y se mostraba partidaria de un referéndum de autodeterminación, asegurando que España tiene "una responsabilidad directa" con ellos.

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S.T.

Sobre su lado más personal se expresaba la mallorquina en una entrevista para el diario 'Última Hora' poco antes de las recientes elecciones municipales y autonómicas. A través de un test de preguntas rápidas descubrimos que su mayor virtud es "la sonrisa fácil", que su defecto es "ser cabezota", que sus actores favoritos son Morgan Freeman y Meryl Streep, que no recuerda la última vez que se emborrachó porque fue "hace muchísimo" y que el mejor momento de su vida fue "cuando fui nombrada la primera mujer presidenta del Govern".

También asegura que el mejor momento de su día es "cenar con mis hijos". Unos hijos a los que citaba en otra entrevista más reciente aún con el 'Diario de Mallorca' en la que aseguraba que no le gustaría que ellos "vivieran un gobierno de PP y Vox". Criticando los pactos que han alcanzado ambas formaciones políticas, continuaba diciendo que "los gobiernos de Madrid y Castilla y León, que funcionan ambos con Vox, no han conseguido aprobar ni un presupuesto. La inestabilidad, la falta de rigor y la falta de compromiso son absolutos".

Los años de Armengol al frente del Gobierno balear no han estado exentos de varias polémicas. Una de las más comentadas fue en 2016 cuando supuestamente Armengol y su pareja intentaron comprar, por un precio muy por debajo del de mercado, un ático de lujo en la mejor zona de Palma de Mallorca.

Más adelante, durante la reciente pandemia de coronavirus, su gestión fue criticada durante un macrobrote en la isla de Mallorca entre estudiantes de toda España que se encontraban de viaje de fin de curso. Tanto sus familias como los partidos de la oposición acusaron a su Gobierno de "secuestro".

También se pidió su dimisión después de que en octubre de 2020 pillaran a Armengol de copas cuando estaban todavía vigentes las restricciones. La presidenta se encontraba de madrugada en un bar que incumplía los horarios marcados por las medidas contra la pandemia. Posteriormente Armengol explicaría que uno de sus acompañantes se desmayó a la salida del local, por lo que se quedaron fuera media hora después atendiéndole, añadiendo que lamentaba lo ocurrido.