Muere Francisco Baena Bocanegra, el abogado de los casos más conocidos de los tribunales de Sevilla

Según los expertos en la crónica legal que comentan su fallecimiento, contratarlo era casi sinónimo de garantía. Hablamos del abogado Francisco Baena Bocanegra, que ha muerto en Sevilla a los 83 años, tras varios años padeciendo cáncer. Quizá su nombre no les dice nada de primeras, pero el letrado ha estado ligado a algunos de los casos más mediáticos dentro y fuera de Andalucía.

Tal y como reflejan hoy los periodistas especializados en la crónica de tribunales, suyos fueron más de 17.000 casos. En algunos de ellos como acusación. En otros como figura principal de la defensa, una posición en la que dicen que se sentía mucho más cómodo.

No se puede decir que ganara todos y cada uno de los casos, pero sí fue responsables de algunas sentencias absolutorias que parecían tener todo en contra, incluidos varios juicios mediáticos. Una de las últimas, la que absolvía al futbolista Rubén Castro por supuestos malos tratos a su pareja. Otra la de Chaves y Griñán por el macroproceso de los ERE de Andalucía.

Pero a sus espaldas cuenta con otros nombres a los que ha llevado de la mano hasta conseguir la sentencia deseada, algunos anónimos y otros mucho más mediáticos y mucho más relacionados con la información que habitualmente tratamos en Vanitatis.

La más reciente, la que llevó a María del Monte y su pareja, Inmaculada Casal, a los juzgados, aunque en su caso como acusación. Cantante y periodista decidieron personarse como acusación particular tras sufrir un robo con violencia en su vivienda de Gines y confiaron en el abogado penalista para defender sus intereses ante el juez.

En este asalto, como recordarán, estuvo también involucrado, según las investigaciones, el sobrino de María, Antonio Tejado, como supuesto autor intelectual. Quien fuera colaborador habitual de televisión hace unos años tuvo que pasar por prisión, haciendo el caso aún más mediático.

Su vínculo con la familia del Monte venía de lejos y la cantante ya conocía su trabajo, no solo por ser uno de los abogados más conocidos de Sevilla, sino por ser el abogado que defendió a varios de los acusados por el caso Arny, entre ellos el hermano de María.

Otro nombre muy conocido que también contrató los servicios de Francisco Baena Bocanegra fue el de María José Campanario, cuando fue procesada por la Operación Karlos por estafa a la Seguridad Social y falsificación de documentos. En su caso, sí fue condenada, pero evitó entrar en la cárcel al serle impuesta una pena de un año y once meses de prisión, sin llegar al mínimo que habitualmente obliga a pasar una temporada entre rejas.

Una carrera ligada a nombres anónimos y no tanto por la que recibió la Medalla al Mérito en el Servicio de la Abogacía, en mayo de 2024. Pero sobre todo, por la que Francisco Baena Bocanegra se ganó el respeto del sector. Un respeto que vemos reflejado hoy en las crónicas que hablan de la muerte de este conocido abogado.