Los Hierros, un encuentro inesperado

Este local situado en el Barrio de Arguelles, es la clásica taberna de toda la vida, más de treinta años la contemplan. Se inauguró el 20 de junio de 1984. Sus propietarios son los cuatro hermanos Jimenez y cada uno tiene su cometido. Pepe, que es el mayor, es el dueño de la cocina, bueno más que cocina sería cocinita, por lo pequeña que es, pero esto no supone ningún problema para hacer platos extraordinarios. Luego estaba Julián, tristemente desaparecido en el mes de octubre, quien se ocupaba de las relaciones públicas, era el que tomaba la comanda y te recomendabaque tomar. Actualmente de este cometido se encarga Basi, que lo hace estupendamente y además es el especialista que se encarga de preparar las copas largas para la sobremesa, sobre todo el gin-tonic. Y por último está Curro, que es el que lleva el peso de la barra.

Abren a las siete de la mañana y cierran a las doce de la noche. Tienen una clientela fiel y muy segmentada. Por las mañanas los desayunos, tienen fama las porras. A mediodía la cañita o el vinito, acompañado de un buen aperitivo. Y a partir de la una y media, se empieza con las comidas, por la tarde las copitas y la partidita de mus y en la noche, las cenas de picoteo.

Lo que podría parecer más complicado, que es la concurrencia simultanea de comensales a la misma hora para comer, sin embargo se produce el hecho curioso de que sus parroquianos tienen las horas cogidas y las mesas se llenan con una rotación casi milimétrica por lo que las esperas no son nunca demasiado largas.

Su cocina es casera y de mercado, no tienen lo que conocemos por menú de día, si bien, todos los días tienen uno o dos platos fijos de cuchara: los lunes, lentejas con chorizo;, los martes, judías blancas y; con el frío el cocidito madrileño. Los miércoles, las patatas con bacalao y; en época de setas, con níscalos. Los jueves, las patatas con carne y; el viernes, que es el día mas flojo porque los trabajos suelen terminar a mediodía, preparan algo que es sorpresa, una de las últimas veces que comí allí, fueron unos callos con garbanzos de los que me puse de grana y oro.

Estos platos se pueden acompañar conalgunas entradasde temporada como sus famosos caracoles y los cangrejos de río. En todo tiempo, el jamón ibérico que es muy bueno, y si además Pepe te fríe unos huevos con sus puntillitas, patatas y un poco de ese jamón, es la leche como diría un castizo. Otras recomendaciones, la ensalada de tomates especiales, la ensaladilla, el revuelto de ajetes y la tortilla de patatas.

Depescados: Sin duda los chipirones en su tinta acompañados de arroz blanco que es el plato que ha dado famaa Los Hierros y el pez espada a la plancha. De encargo preparan gallo y el rape.

Decarnes: entrecot de lomo alto, chuletillas de lechal, albóndigas de ternera, el solomillo de cerdo guisado y los platos estrellas que son: el conejo, el pollo ajillo y la gallina en pepitoria

Y para terminar como Dios manda, un postre casero como el flan con caramelo, la cuajada o la fruta del tiempo.

La bodega es corta, con algunas añadas de La Rioja y La Ribera del Duero, siendo el vino de la casa el Rioja Beronia.

Precio de una comida en torno a los 15 €.

Quintana, 17.- Madrid Teléfono 915471949