Marta Lozano, sus tres vestidos de boda y la espectacular fiesta tras la ceremonia

Marta Lozano ha sido la gran protagonista de este fin de semana. La famosa influencer contrajo matrimonio el sábado 28 de mayo al medio día con el odontólogo Lorenzo Remohi en una multitudinaria boda celebrada por todo lo alto en Jávea. La pareja sellaba su amor en la misma localidad donde se conocieron y donde veranean desde niños.

La alicantina iglesia de San Bartolomé fue testigo de este enlace. Allí, Marta Lozano lució su primer vestido de novia, un diseño clásico de Lorenzo Caprile confeccionado con crêpe de seda blanco con una cola de más de 5 metros de largo y silueta sirena, manga larga, escote abierto y espalda descubierta.

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Patricia Izquierdo

A la salida de la iglesia, un coche descapotable trasladó a la pareja hasta la espectacular finca en la que tuvo lugar la cena y la posterior celebración. Al llegar al lugar, Marta y Lorenzo animaron a sus invitados, cantando y bailando al son de la música en directo que amenizó la velada antes de la cena.

Gracias a los stories que la propia protagonista publicó en sus redes sociales, hemos podido ser testigos no solo del gran ambiente festivo que se generó durante la cena y en la fiesta posterior, sino también de la espectacular decoración de las mesas, cuidada al detalle, con vistoso centros de flores blancas, velas y lámparas de cristal.

Tras la cena, faltaba que la novia desvelara el segundo diseño de Caprile que tenía preparado para la fiesta que les esperaba.

Con ramos de flores en las manos que repartieron entre algunos familiares, los recién casados aparecieron ante la ovación de los presentes, todos ellos con bengalas luminosas en las manos que agitaban al ritmo de la música.

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Fue en este momento cuando Marta sorprendió con su segundo look. En él, las plumas fueron las protagonistas. La influencer ya había demostrado en ocasiones anteriores lo mucho que le gustan estos adornos en looks de gala. Las plumas estuvieron presentes, por ejemplo, en las mangas de su vestido escogido para su despedida de soltera. También, cuando acudió de invitada a la boda de la influencer María Pombo, Lozano se decantó por un vestido rojo con adorno de plumas en la falda.

En esta ocasión, toda la falda de su segundo vestido estaba compuesta por plumas. La abertura lateral permitía ver sus Manolo Blahnic, el broche perfecto para su estilismo. El diseño contó con un cuerpo palabra de honor tipo corsé que le sentaba como un guante.

La fiesta posterior a la cena, que tuvo lugar en un amplio espacio en el que no faltaron diversas atracciones, estructuras hinchables, música en directo, discoteca y DJ, se alargó hasta que comenzó a amanecer. Los fuegos artificiales, los bailes y los cánticos junto a sus invitados no cesaron. Tampoco faltó un toro mecánico.

No fue hasta las 3 de la mañana cuando la novia decidió cambiar su look y lucir el último diseño de Caprile que tenía preparado para la ocasión. Se trató de un vestido muy sexy y más atrevido que los anteriores, con cuerpo tipo corsé rematado en puntas y una falda corta fruncida, así como un collar 'choker' del que salía una capa con luces de ella que luego abandonó para bailar y moverse entre sus invitados.

Como complementos destacaron una diadema con redecilla y un abanico en el que, de nuevo, las plumas estaban presentes. Esta vez, los zapatos elegidos estaban adornados con una lazada.

Para los tres looks de boda, Marta Lozano mantuvo su recogido ‘ballerina bun’ con la raya al medio y el pelo completamente apartado del rostro llevado a cabo por los especialistas de Llongueras, así como el impecable maquillaje de Dior.