El día que Portia de Rossi rescató su vestido de novia 15 años después de la boda con Ellen DeGeneres

El 16 de agosto de 2008, la presentadora Ellen DeGeneres y la actriz Portia de Rossi hicieron historia con su boda. No solo por tratarse de una de las primeras uniones lésbicas entre famosas, también porque con ellas el estado de California inauguraba los enlaces entre personas del mismo sexo. Fue una celebración íntima, en la mansión de la televisiva y con solo 19 invitados entre familiares y amigos cercanos. Lo curioso de esta boda es que tres meses después de promulgarse la ley, en noviembre de ese mismo año, fue derogada. No sería hasta 2013 cuando se reanudaron los enlaces homosexuales.

De ese momento, hace 15 años. Un matrimonio, de los más sólidos y estables del panorama celebrity, que sigue siendo noticia. ¿El motivo? La renovación de votos sorpresa que ambas han protagonizado y compartido en sus redes sociales.

Sorpresa, en realidad, para la reputada presentadora, que no sabía lo que su mujer había organizado en secreto para su fiesta de cumpleaños. El pasado 31 de enero, la actriz de la mítica serie 'Ally McBeal' cumplía 50 años y, en mitad de la celebración, apareció entre los invitados vestida de novia para el asombro de Ellen DeGeneres, que no sabía que iba a vivir una renovación de sus votos matrimoniales 15 años después.

"Portia me sorprendió en su fiesta de cumpleaños al renovar nuestros votos. Gracias Kris Jenner por oficiar y Brandi Carlile por actuar, y a Portia por ser el mejor regalo para mí, incluso en tu cumpleaños", ha escrito DeGeneres en su perfil de Instagram.

En el escueto vídeo que subió a las redes sociales se ve cómo, de forma inesperada, Portia de Rossi se coló entre los asistentes a su fiesta de cumpleaños enfundada en un traje de novia y fue andando hasta llegar al punto en el que se encuentra su mujer, cerca de la cantante Brandi Carlile, que amenizó el momento cantando con la guitarra.

Mientras asume la situación y la actriz le entrega un ramo, entró en escena Kris Jenner, que, en este caso, se encargó de oficiar esta preciosa e íntima renovación de votos. "Nacieron la una para la otra", comenzó en su discurso. "Siguen sorprendiéndome con lo lindas que son juntas. Son una pareja hecha en el cielo. Su amor y su compromiso mutuo son increíbles y me hace muy feliz que se tengan para amarse, quererse y envejecer", dijo la madre de Kim Kardashian.

A lo emotivo y entrañable de esta segunda boda, se suma una curiosidad en clave fashion. La novia se puso el mismo vestido que lució en su primer enlace en 2008. Demostrando que aquel traje que Zac Posen diseñó hace 15 años para ella le sigue quedando como un guante, Portia decidió desempolvar esta increíble pieza y así dejar sin palabras a la presentadora estadounidense.

Amigo de la pareja, el diseñador confeccionó para la actriz un espectacular vestido en rosa palo con un pronunciado escote en V atado al cuello, espalda al descubierto, cintura ajustada con una especie de falso fajín y, de ahí, una descomunal y voluminosa falda con varias capas de tul. Si el 16 de agosto de 2008 lució la pieza nupcial con su melena recogida, para la nueva boda hizo lo mismo y añadió un ramo con tres rosas blancas anudado con una cinta gris.

Un traje de novia de Zac Posen que, dada su belleza y la influencia que tuvo después en el mundo nupcial, ha sido objeto de exposición en diferentes muestras sobre vestidos de celebrities.