Nicolás de Dinamarca, sobre el ictus de Joaquín: "Ha unido más a la familia"

Hace poco más de un mes, el pasado 24 de julio, el príncipe Joaquín de Dinamarca sufrió un ictus mientras disfrutaba de sus vacaciones de verano en el castillo de Cayx (ubicado al sur de Francia) junto a su mujer, la princesa Marie, y sus cuatro hijos. Un problema de salud que trasladó de inmediato al segundo hijo de la reina Margarita a Toulouse​ para ser operado y donde llegó a estar ingresado durante un par de semanas. Hoy, ya en casa desde hace algún tiempo, Joaquín se recupera poco a poco y en paz del gran susto sufrido a la espera de retomar su agenda de compromisos oficiales y que le iba a llevar a comenzar sus labores como agregado militar.

Hoy, Nicolás de Dinamarca, primer hijo de Joaquín fruto de su matrimonio con Alexandra, actual condesa de Frederiksborg, ha concedido una entrevista a una revista de su país con motivo de su 21 cumpleaños donde, además de contar cómo avanzan sus estudios en administración de empresas y su carrera como modelo profesional -recordemos que a día de hoy ha desfilado para grandes de la moda como Dior o Burberry-, ha narrado cómo ha vivido su familia el ictus de su padre y qué valiosa lección han aprendido de ello.

Bajo el lema de vida de que siempre hay que ver el lado bueno de las cosas, Nicolás ha confesado a la revista 'BT' que, aunque la enfermedad de su padre ha supuesto un punto de inflexión en su salud, también "ha unido más a toda la familia y nos ha hecho recordar que siempre y pase lo que pase nos tenemos los unos a los otros", destaca el príncipe Nicolás.

Eso no quita para que en un primer momento toda su familia, desde su abuela la reina Margarita y su madre, Alexandra, hasta sus hermanos o la actual mujer de su padre, Marie de Dinamarca, sufrieran una gran conmoción por lo ocurrido, y es más, manifieste públicamente que "todos nos sorprendimos", pero que ahora con el paso del tiempo y con su padre ya en casa recuperándose, vean en este horrible capítulo de sus vidas una oportunidad para estar más unidos.

El día que sopla las velas de su 21 cumpleaños, el príncipe Nicolás puede estar seguro de haber recibido ya el mejor regalo de todos, poder estar junto a su padre y el resto de sus seres queridos.