Emiratos Árabes se pronuncia sobre Latifa, la princesa que denunció su secuestro

La princesa Latifa Al Maktoum, de 35 años, es una de las 30 hijas del jeque Mohamed ben Rachid Al Maktoum. Esta semana la preocupación por su vida y su bienestar se acrecentó en todo el mundo ante las impactantes imágenes y palabras que la joven emitió a través de un vídeo que grabó a escondidas en su cuarto de baño y que fueron difundidas por la BBC británica.

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Ignacio Cembrero

“Soy una rehén y esta villa ha sido convertida en cárcel […]. Las ventanas están cerradas con rejas […]. Hay cinco policías en el exterior y dos mujeres policías en el interior de la casa […]. No puedo salir al exterior y respirar aire fresco […]. Cada día estoy más preocupada por mi seguridad y por mi vida […]. No sé si sobreviviré a esta situación […]. La policía me ha amenazado con que estaré en la cárcel toda mi vida y no volveré a ver nunca el sol”, dice Latifa en voz baja y visiblemente asustada desde la mansión de alta seguridad en la que reside en Abu Dabi.

Latifa denuncia haber sido secuestrada hace dos años frente a la costa India por un comando militar enviado por su propio padre cuando trataba de huír de Dubái.

Tras peticiones de varias organizaciones y tras los temores de varias figuras políticas británicas respecto a la salud de la princesa Latifa Al-Maktoum, la Embajada de los Emiratos Árabes Unidos en Londres se ha visto obligada a dar un paso al frente tras años de silencio. Tratando de tranquilizar a todos, se ha asegurado que la princesa está siendo "cuidada en casa". "En respuesta a los informes de los medios sobre Sheikha Latifa, nos gustaría agradecer a aquellos que han expresado preocupación por su bienestar, a pesar de la cobertura que ciertamente no refleja la situación real ", reza el el comunicado. “Su familia confirmó que Su Alteza estaba siendo atendida en casa, apoyada por su familia y profesionales de la salud. Su estado sigue mejorando y esperamos que retome su vida pública en su momento", añade.

Dicha afirmación no ha calmado las aguas. Las mismas voces que expresaron esta semana su preocupación por Latifa, exigen a Emiratos Árabes una prueba de que Latifa está viva y en perfectas condiciones, algo que, de momento, no ha llegado. La falta de esa prueba hace que la preocupación y la desconfianza aumenten por momentos.