La ola de preocupación por Charlène de Mónaco en la prensa internacional
El comunicado emitido por el Principado hace saltar las alarmas sobre la salud de la mujer de Alberto de Mónaco
“Sus Altezas Serenísimas han decidido que empieza un periodo de calma y descanso necesario para garantizar la mejor recuperación de la salud de la princesa Charlène. Teniendo en cuenta que ha luchado contra sus problemas de salud en los últimos meses, la Princesa está actualmente convaleciente y continuará haciéndolo durante las próximas semanas, dándole tiempo a recuperarse de un estado de profunda fatiga general”. Este es el comunicado que ha emitido el Principado de Mónaco y que ha hecho saltar las alarmas sobre la salud de la mujer de Alberto de Mónaco, quien está teniendo una convalecencia mucho más larga de lo que parecía en un principio.
Todas las expectativas estaban puestas en su reaparición este miércoles en el Día Nacional de Mónaco, pero el hecho de que estratégicamente se haya distribuido un comunicado desvelando que estará presente ha hecho que las especulaciones sigan creciendo, surjan más preguntas sin respuesta y, sobre todo, que la prensa internacional haya llevado a la exnadadora sudafricana a las portadas de sus ediciones digitales, al igual que ha ocurrido en España.
El apoyo de Estefanía de Mónaco
La princesa Charlène no había acompañado a su marido a la Expo de Dubái, pero en este caso tenía más lógica, pues suponía un largo viaje que tal vez no fuera lo más recomendable para su estado actual, pero que haya cancelado esta aparición protocolaria y tan significativa ha hecho saltar las alarmas. Desde que trascendieran sus problemas de salud el pasado mes de mayo, la información que se ha suministrado no ha sido demasiado precisa, como suele ocurrir en estos casos. Es más, su prolongada ausencia desató los rumores incluso de una posible crisis matrimonial en la pareja que, de momento, parece desmentida, a tenor de los últimos acontecimientos.
Una de las dudas mayores es dónde está viviendo en la actualidad, si en palacio o en un apartamento, buscando una mayor tranquilidad si cabe. Y esta es precisamente una de las cuestiones que la prensa internacional lleva a sus informaciones que se mueven a medio camino entre la empatía y la preocupación, pues siempre se había esgrimido como argumento de la larga estancia de la princesa en su país que los médicos no le recomendaban que volara, pues era perjudicial para su condición, y el hecho de que regresara se había interpretado como una mejora sustancial de su salud.
En 'Monaco Tribune' se limitan a reproducir el comunicado oficial de la familia Grimaldi y enfatizan el hecho de que Charlène está pasando esta convalecencia en un lugar indeterminado.
La agencia Reuters también incide en la idea de que la princesa Charlène evita sus obligaciones públicas y alude de nuevo al comunicado, en el que se ponen de manifiesto los problemas de salud de la cuñada de Carolina de Mónaco, quien había manifestado tener unas enormes ganas de volver a Mónaco para reunirse con su marido y sus hijos.
'Royal Central', un medio británico especializado en las monarquías de todo el mundo también ha llevado a la primera posición de su portada esta noticia de gran impacto, pues las expectativas de que regresara a la vida pública eran muy altas. Precisamente por sus cuestiones de salud se especuló con diversas fechas, pero una vez emitido el comunicado, que no precisa temporalmente cuanto tiempo estará apartada, resulta más complicado hacer predicción alguna. Una fecha que podemos aventurar a medio plazo es la tradicional entrega de regalos navideños en Montecarlo a los niños, pero tal vez sea prematura.
La revista 'Gala' lo lleva también a la primera posición de su home, en este caso enfatizando la condición secreta del alojamiento de la princesa Charlène, que ha tenido que ser intervenida por su dolencia del oído, la última de ellas a principios de octubre y de urgencia.
En la edición digital de la misma revista en Alemania también optan por el mismo enfoque, la petición de privacidad que ha formulado el Principado para que respeten su intimidad durante este periodo de convalecencia.
En 'Bunte', una de las publicaciones más leídas de Alemania, inciden en la idea de la preocupación por la salud de Charlène, quien ha ido compartiendo información, no muy habitual, sobre sus últimos pasos en su perfil de Instagram, donde tiene unos 366.000 seguidores.
En el diario italiano 'Il Corriere della Sera' se habla de una Charléne de Mónaco "muy débil" que tiene que renunciar a la participación en la Fiesta Nacional, una ocasión, por cierto, que sirve para poner de manifiesto de manera implícita el estado de las relaciones de la familia Grimaldi.
En la revista francesa 'Voici' recurren al clickbait de manual, al afirmar que "por qué ella no estará presente en la Fiesta Nacional el 19 de noviembre".
En cualquier caso, este miércoles todas las miradas estarán puestas en Mónaco, que celebrará su Día Nacional con una atención mediática previsiblemente mayor de lo habitual, precisamente por la ausencia de Charlène. El año pasado compartió protagonismo con su cuñada, Carolina de Mónaco, quien suele ser una de las reinas del estilo en cada una de sus apariciones públicas. Y en esa ocasión también lo fue, con un modelo de Chanel, una de sus firmas predilectas. La princesa de Hannover (recordemos que aún no se ha divorciado de Ernesto de Hannover, de actualidad en España por su noviazgo con la hija de Pitita Ridruejo) es uno de los mayores apoyos de su hermano, Alberto de Mónaco, pero siempre se ha creído que ha sido Estefanía con la que más sintonía ha tenido.
“Sus Altezas Serenísimas han decidido que empieza un periodo de calma y descanso necesario para garantizar la mejor recuperación de la salud de la princesa Charlène. Teniendo en cuenta que ha luchado contra sus problemas de salud en los últimos meses, la Princesa está actualmente convaleciente y continuará haciéndolo durante las próximas semanas, dándole tiempo a recuperarse de un estado de profunda fatiga general”. Este es el comunicado que ha emitido el Principado de Mónaco y que ha hecho saltar las alarmas sobre la salud de la mujer de Alberto de Mónaco, quien está teniendo una convalecencia mucho más larga de lo que parecía en un principio.
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