El cambio de vida de Josephine de Bélgica, la princesa más desconocida
Son muchos los royals que estos días vuelven a las aulas tras el merecido descanso veraniego. Una de ellas, la hija de la princesa Delphine de Bélgica
Tiene 18 años y es una de las princesas más desconocidas de Bélgica. El motivo es de sobra conocido, puesto que su madre, la princesa Delphine, no fue reconocida como hija del rey Alberto de Bélgica hasta hace un par de años y tras una ardua batalla legal. Josephine ha disfrutado de ser la sobrina del rey actual de Bélgica desde la sombra sin vivir en carnes propias lo que significaba ser una princesa hasta 2020, cuando los tribunales le dieron la razón a su madre, reconociéndole el derecho a usar el apellido Sajonia-Coburgo y el título de princesa de Bélgica.
Ahora la joven se traslada a Holanda para comenzar sus estudios universitarios, que no ha elegido por casualidad. Precisamente, la nieta que fuera ilegítima del rey Alberto estudiará algo centrado en los Derechos Humanos, inspirada por la lucha de su madre por destapar la relación extramatrimonial que tuvo su padre con la baronesa Sibila de Selys Longchamps.
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Son muchos los royals que estos días están volviendo a las aulas, como ya le ha pasado a la mismísima princesa Leonor, que el pasado 26 de agosto tenía que volver a Gales para continuar con sus estudios en el UWC Atlantic College.
Josephine vivía con su madre Delphine, su padre Jim O’Hare -del que no está casada pero con el que mantiene una relación de cerca de 20 años-, y su hermano Oscar, que tiene 14 años y que el próximo 1 de septiembre comenzará el tercer año de instituto en Bruselas. Ahora tendrá que cambiar de vida y dejar el que ha sido su hogar para estudiar Artes Liberales y Ciencias en una universidad en los Países Bajos. Un centro en el que se destaca que los estudiantes aprenden a comprender cuestiones complejas, para buscar después soluciones creativas.
La princesa más desconocida de Bélgica se centrará en los Derechos Humanos, según declaraba recientemente su madre, que explicaba que Josephine quiere ser abogada después de presenciar la batalla legal de su progenitora contra el rey Alberto para ser reconocida legalmente como su hija legítima. Momentos que han sido muy complicados para la hermana del rey Felipe, que ha pasado de estar metida en una lista negra internacional a participar en los actos oficiales de Bélgica, como las celebraciones de la Fiesta Nacional.
Josephine no habla neerlandés, por lo que estudiará en Holanda con las clases en inglés. Precisamente es este el idioma que siempre se ha hablado en su casa, debido a que su madre vivió en Londres durante años y su padre es irlandés americano. No es el único idioma que habla la joven de 18 años, puesto que hasta ahora acudía a un colegio en francés, el Notre Dame des Champs, al que acudíaen su ciudad natal, Uccle, en Bruselas.
En la familia real belga no es la única que comenzará la universidad por primera vez. También lo hará la princesa Louise, de 18 años, hija del príncipe Laurent, hermano del actual rey y de la princesa Delphine. Louise se ha matriculado en Ciencias Sociales, aunque no ha querido confesar en qué universidad para evitar el acoso mediático. Sus hermanos gemelos, Nicolas y Aymeric tienen actualmente 16 años y también han comenzado este mismo lunes su quinto y penúltimo curso en el Liceo Francés Jean Monnet de Uccle, donde Louise estudió primaria y secundaria.
Además, dos de los hijos de los reyes Felipe y Matilde también han tenido que volver a las clases. Es el caso de Enmanuel, que regresaba la semana pasada a la Escuela Internacional de Bruselas, la privada Watermaal-Bosvoorde, para alumnos con dificultades de aprendizaje, como el hijo menor del rey. Por su parte, el príncipe Gabriel se incorporaba la semana pasada a sus 19 años a la Real Escuela Militar de Bruselas. Este pasado miércoles partió junto a sus 240 compañeros hasta los Cantones del Este para un campamento militar de seis semanas. La princesa Eleonore no comenzará las clases hasta el próximo 1 de septiembre en el Heilig-Hartcollege de Wezembeek-Oppem, y la princesa Elisabeth aún tiene tiempo de vacaciones, hasta que a mediados de octubre comience su segundo curso de Política e Historia en el Lincoln College de Oxford.
La princesa Astrid y el príncipe Lorenz solo tienen a una de sus cinco hijos que aún estudia, a sus 19 años. Laetita comenzará próximamente su segundo año de Ciencias del Arte en el University College de Londres. Sus hermanos Amadeo, Laura, Joaquín y Luisa ya han finalizado sus estudios y están en activo. Mientras el primero es economista y trabaja en el banco privado de Basilea donde su padre es uno de los directivos, Laura hace lo propio en una ONG infantil en Londres. Pronto pasará por el altar en Bruselas. Joaquín, por su parte, hizo un máster en Administración de Empresas en Harvard Business School y Luisa es abogada en Londres.
Tiene 18 años y es una de las princesas más desconocidas de Bélgica. El motivo es de sobra conocido, puesto que su madre, la princesa Delphine, no fue reconocida como hija del rey Alberto de Bélgica hasta hace un par de años y tras una ardua batalla legal. Josephine ha disfrutado de ser la sobrina del rey actual de Bélgica desde la sombra sin vivir en carnes propias lo que significaba ser una princesa hasta 2020, cuando los tribunales le dieron la razón a su madre, reconociéndole el derecho a usar el apellido Sajonia-Coburgo y el título de princesa de Bélgica.