Marie Kondo se rinde y reconoce que con tres hijos es imposible tener la casa ordenada

A sus 38 años, la implacable japonesa que nos invitaba a tirar cualquier objeto de nuestra casa que no despertara alegría en nosotros ha sorprendido a su ejército de fans cuando declara haber renunciado a mantener su propia casa ordenada después de tener tres hijos, diciendo que pasar tiempo con su familia es más importante. Marie Kondo ganó millones con su estricto estilo de vida gracias a la venta de 13 millones de copias de su primer libro, tras el que protagonizó un exitoso programa de Netflix.

Pero después de dar a luz a su tercer hijo, se está dando cuenta de que simplemente no tiene tiempo suficiente. "Hasta ahora, yo era una organizadora profesional, así que hice todo lo posible para mantener mi casa ordenada en todo momento", dijo durante una conferencia en unas palabras que recoge el 'Washington Post'. "He dejado de serlo en el buen sentido para mí. Ahora me doy cuenta de que lo importante para mí es disfrutar del tiempo que paso con mis hijos en casa".

Kondo dio a luz a su tercer hijo en 2020, un 'bebé gigante' que provocó una catarata de bromas en las redes, que se suma a las dos hijas que ya tenía junto a su marido, Takumi Kawahara, con quien se casó en 2012 y que también es su socio profesional.

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"Mi casa está desordenada, pero la forma en que paso el tiempo es la correcta para mí en este momento y en esta etapa de mi vida", afirma ahora Kondo de forma muy poco consecuente con el discurso que sus fans han seguido a rajatabla hasta ahora.

Su nuevo estilo de vida sigue estando basado en su "fuente de alegría", como dijo en su primer libro, pero su aceptación del desorden ha inspirado su quinto volumen, que salió a la venta en noviembre de 2022 y se centra menos en el orden y más en el kurashi, un concepto japonés que se traduce aproximadamente como "la forma ideal de pasar el tiempo" y se centra más en ordenar el tiempo que el espacio.

"Ordenar significa ocuparse de todas las cosas de la vida", escribe en este libro, acercándose al ideal que predica ahora. "Cuando estábamos los dos solos, mi casa se acercaba bastante a ese ideal; ahora, esas fotos son solo el ideal al que aspiro. Mi propia casa no está completamente ordenada, pero supongo que podría llegar a ese punto si me pusiera a limpiarla durante una o dos horas", dijo en una entrevista para el 'Daily Mail'.

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Entonces Kondo aseguraba también que "tienes diferentes prioridades y ahora mismo lo que me da alegría es jugar con mis hijos, pasar ratos divertidos con ellos y no pasa nada si todo está un poco desordenado. No quiero perder el tiempo enfadándome. Tus hijos solo son pequeños una vez, así que, no te preocupes, disfruta de ese tiempo".

Desde que regresó a Japón desde Estados Unidos –país al que se mudó tras el éxito de su primer libro–, la empresaria y escritora afirma que su estilo de vida ha cambiado totalmente. "Cuando empecé, trabajaba mucho y ese era mi ideal. Daba muchas clases, ayudaba a mucha gente y adquiría mucha experiencia. Pero ahora quiero pasar más tiempo con mi familia", explicaba al diario británico.

Ahora, ella y su marido planifican el tiempo que pasan con la familia y encuentran pequeñas actividades que también siguen despertando su alegría, como quemar incienso y tomar una taza de té por la mañana.