Elsa Pataky cambia de look y se vuelve morena... ¿Tinte, filtro de Instagram o tendencia?

Un inesperado selfie acompañada de la mujer de Matt Damon nos dejaba claras dos cosas: una, que las amigas de Elsa se mantienen tan bien como ella, y la otra, que Elsa Pataky ha recuperado su melena castaño oscura de la época 2000, concretamente 2004 y 2006.

Sabíamos que las tendencias gritaban que esta era la coloración del año, pero tras décadas de rubio platino, oxigenado por el idílico clima de la costa australiana, nada nos hacía imaginar que la actriz madrileña volvería a teñir su cabello de una forma radical. Si hace unas semanas nos hacíamos eco de su cambio de look por exigencias del guion, en esta ocasión es la propia Elsa la que apunta a su estilismo y, por la naturaleza de la foto, parece que no se trata de un efecto secundario del rodaje.

Como se puede apreciar en la raíz del cabello, para conseguir esa coloración castaño ligeramente rojiza, lo más probable es que se haya recurrido a un tinte para lograr un tono homogéneo y cubrir toda la melena. Aquí no hay hueco para las mechas. El cabello natural de Elsa Pataky no es el rubio platino que estamos acostumbrados a ver, sin embargo sí es claro, más cercano al rubio ceniza.

Las puntas de la nueva Elsa morena se notan un poco más claras, consecuencia de la oxidación a la que está expuesto el cabello. Las puntas son la parte más antigua del cabello y, por tanto, donde se acumula la mayor incidencia del sol, la sal, las fuentes de calor, etc. Por eso, el tinte no ha agarrado en esa zona con tanta fuerza como en la raíz, donde vemos un chocolate muy intenso.

Un detalle curioso es que, ahora, las cejas de la actriz sí parecen encajar a la perfección con el tono de su cabello, lo que consigue que el look parezca mucho más homogéneo. El superpunto a favor de esta coloración más oscura es que los ojos destacan mucho más en contraste con el castaño de la melena.

Volviendo más de una década al pasado, Elsa Pataky ya recurrió a esta estrategia de oscurecerse el pelo y centrar toda la atención en su mirada. En 2004, cuando la actriz se paseaba del brazo de Michaël Youn, lucía una melena mucho más oscura y larga que la actual. Poco a poco volvió a su rubio mechado y, de nuevo en 2006, cuando estaba inmersa en plena relación con Adrien Brody, volvió a oscurecer su cabello. En esta ocasión se trataba de un castaño mucho más natural que tuvo un inmediato efecto rejuvenecedor en su imagen. Por aquel entonces Elsa tenía 30, es decir, era muy joven, pero de repente pareció tener los 20 recién estrenados.

Este castaño mucho más claro estaba iluminado de una forma muy natural, y la actriz lo llevaba peinado con bucles, ganando mucho más volumen y creando una imagen naíf y muy distinta a la que había lucido hasta entonces. Tras terminar con Adrien, Elsa volvió al rubio, hasta el día de hoy, casi 15 años después. En un momento en el que la prensa australiana apunta a un distanciamiento de la pareja, la teoría de un cambio de look podría coger peso. Sin embargo, casi a la vez que publicaba la foto de su cabello castaño, en el Stories de Elsa Pataky aparecía la Elsa de siempre con su melena rubia… ¿Cambio de look para iniciar una nueva etapa? ¿Mentirijilla piadosa? ¿Filtro de Instagram?... Solo el tiempo lo dirá.