Parches antigranitos: tratamientos que se pegan y funcionan

¿Quién no se ha despertado con un enorme e inesperado grano? Prevenir su aparición es lo suyo. Todos sabemos eso de mantener una correcta limpieza y utilizar cosméticos que no obstruyan los poros, pero cuando el daño ya está hecho, la única solución es tratar el granito para que se reduzca en el menor tiempo posible. Limpiar la zona, calmar la hinchazón y reducir la infección es lo básico, pero hacerlo de una forma localizada, es decir, en un granito concreto puede ser algo complicado.

Los parches antiacné consisten en un pequeño apósito cargado de ingredientes activos que actúan de forma localizada en un granito. El sticker se adhiere y, durante varias horas permite que los ingredientes penetren, curando el grano y calmando la piel. Algunos parches incluso aceleran el ciclo del granito.

Entre los ingredientes fundamentales, el ácido salicílico es uno de los componentes más repetido. Este betahidroxiácido facilita la eliminación de las células muertas que se acumulan en la superficie de la piel, penetrando en los poros y deshaciendo la suciedad, además de regular la producción de grasa. El ácido salicílico es también antiinflamatorio y antibacteriano, lo que evita que proliferen las infecciones.

La centella asiática es otro ingrediente habitual de los tratamientos antiacné al ser un agente calmante, capaz de reducir la inflamación que acompaña a los granos. El aceite de árbol del té, por ejemplo, combate la infección del acné, al ser antiséptico, antiinflamatorio y antifúngico.

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Otro ingrediente que llega desde Corea y que es un interesante aliado antiacné es la mucina de caracol, utilizada sobre todo en el tratamiento de las marcas consecuencia del acné, reduciendo la apariencia de las cicatrices y estimulando la regeneración de la piel. Completan las listas antigranitos la hierbabuena, el aloe vera o la vitamina A.

Si hace años encontrar una pegatina antiacné para reducir un granito resultaba una tarea algo complicada, cada vez son más los parches disponibles, pudiendo incluso elegir entre los resultados que se deseen.

Parches antiacné localizado

Peace Out Spots de Peace Out Skincare, 18,99€ en Sephora, cumplen con la doble función de calmar e hidratar. Con ácido salicílico y aloe vera, evitan que el granito prolifere, resecándolo, además de reduciendo su hinchazón.

Mighty Patch de Hero Cosmetics, 27,73€ en Amazon, son los parches antiacné más vendidos y valorados de la tienda online. Gracias a los hidrocoloides, aceleran el proceso del granito durante la noche, sin resecar la piel y evitando la aparición de manchas.

The Good Fight de Patchology, 11,99€ en Sephora, a diferencia de los stickers, funciona como una mascarilla que cubre las zonas conflictivas: frente, nariz y mejillas gracias a su forma de cruz. Si bien no reduce el acné, sí calma las zonas irritadas gracias a su mezcla de hierbabuena, corteza de sauce y el multiusos árbol de té.

Parches antigranos Zitless de Acnemy, 25,95€ en Primor, a diferencia de otros parches, actúa en un tiempo muy reducido. Gracias a sus 24 microdardos, penetra con mayor facilidad en la piel y permite que actúe su fórmula que combina ácido salicílico, retinol, ácido hialurónico o niacinamida, entre otros.

Dots for Spots, 17,99€ en Amazon, son parches con hidrocoloides que aceleran el proceso de curación del grano pero sin resecar la piel.

Breakout Box de Patchology (c.p.v.) es un completo pack para limpiar y tratar los granitos a través de sus tres pasos: 1. Peeling para absorber la suciedad, 2. Parche para eliminar las células muertas y 3. Tratamiento calmante.

Acne Pimple Master de COSRX, 6,95€ en Lookfantastic, llega desde Corea con un tratamiento concentrado que puede aplicarse en granitos y puntos negros. Su particularidad, además de ofrecer tres tamaños según la imperfección, es el momento en el que se deben utilizar, durante la noche, para actuar en esa fase de actividad de la piel y despertar con el granito visiblemente reducido.