Cómo se hizo en realidad el polémico corte de pelo de la hija de Charlène de Mónaco

Con tan solo 7 años, la pequeña Gabriella de Mónaco rezuma una personalidad arrolladora. Sus looks saturados de marcas con recreaciones en tamaño mini de grandes firmas como Dior, su media melena siempre accesorizada y, por supuesto, sus posados oficiales en los que es imposible que no termine con una mueca son prueba de ello.

Gabriella es única y sus padres fomentan su personalidad ecléctica, manteniéndola al margen de protocolos. Justo hace un año, descubríamos la última ‘travesura’ de la diminuta royal. Según confesaba su madre en un post de Instagram, la pequeña decidía cortarse el pelo sin pedir ayuda ni consejo. “Gabriella decidió hacerse un corte de pelo a sí misma”, contaba la princesa.

El polémico cambio de look de la pequeña consistía en una reinterpretación de su melena francesa, centrándose especialmente en el flequillo. "Es un flequillo en uve, ya que reproduce la forma de esta letra, dejando en el medio el vértice, el punto más largo”, precisaba en su día Charo García, de Ilitia Beauty & Science, en Bizkaia. Estamos acostumbrados a ver este tipo de flequillos en la estética punk, siendo poco habituales en niños, de ahí la sorpresa al ver aparecer a Gabriella junto a su hermano y sus padres en su posado en Sudáfrica, tierra natal de Charlène.

El gusto por los estilismos arriesgados es algo habitual en la familia. La propia Charlène ha experimentado con distintos grados de rapado, sorprendiendo hace unos años con un bowl cut (pelo tazón) al que incorporaba un rapado lateral. Con aquel corte de pelo tan trasgresor, prensa y opinión pública se llevaron las manos a la cabeza al tiempo que la sudafricana confesaba que le encantaban los cambios de look radicales y que seguiría practicándolos.

Un corte de pelo ‘do it yourself’

… O no. Mientras Charlène deposita su total confianza en su estilista, encargado de materializar las ideas que la princesa le propone, Gabriella parece ser más de la teoría 'yo me lo guiso, yo me lo como', como explicaba su madre. Un inocente juego con las tijeras, probablemente para imitar los radicales cortes de pelo de su progenitora, terminó con varios tijeretazos en la melena y, sobre todo, flequillo de la niña.

El corte en uve que genera la sensación de una frente más amplia llamaba la atención en la fotografía familiar de los príncipes de Mónaco, lo que hacía que Charlène explicara la imagen de su hija, desmintiendo el rumor de que fuera idea de ella para que su hija luciera una estética similar a la suya.

Sin embargo, bajo el ojo de un experto, el corte de pelo de la pequeña habría sido modificado por un profesional que habría arreglado sus tijeretazos, optando por el arriesgado estilismo. “Podrían haber cortado un flequillo bebé o baby bang o de lado para no dejarle un flequillo en uve”, expone la estilista, para la que otra posible solución habría sido disimularlo con el peinado como ya hiciera su madre en el pasado, antes que apostar por este tipo de flequillo.

Lo sentimos, Charlène no es la peluquera (aunque ella lo asegure)

Según la peluquera, el corte de pelo que veíamos en las fotografías compartidas por los príncipes monegascos habría sido retocado por un estilista profesional, utilizando técnicas y herramientas específicas para crear un look tan geométricamente pulido, en el que nada queda a la improvisación. “En cuanto a las tijeras, pueden haber utilizado unas de filo de navaja para crear un corte preciso y a la vez desfilar”, algo que habría rematado con unas tijeras de esculpir para igualar las dos zonas y quitar volumen. El primer corte de pelo, realizado supuestamente por Gabriella mientras jugaba, se habría llevado a cabo con unas tijeras poco recomendadas para cortar el cabello, lo que hace más probable que el pelo quede desigual.

Queda descartado, por tanto, que la fotografía tuviera lugar de una forma improvisada. En un fallido intento por lograr un armónico posado familiar en Sudáfrica, la urgencia capilar habría hecho que alguien arreglara el cabello de la pequeña. Aunque Charlène explicaba en Instagram que había sido ella misma la que había intentado solucionar el fatal corte de pelo de Gabriella sin mucho éxito, la precisión del corte de pelo es, a ojos de peluqueros, obra de un profesional.

La vida después del arriesgado flequillo

La evolución del corte de pelo de Gabriella podía seguir dos direcciones. Por un lado, podríamos encontrarnos con un look recortado mensualmente para mantener la estética más punk. Por el otro, spoiler: es lo que ha ocurrido, sus padres habrían optado por que el cabello de la niña siguiera creciendo hasta conseguir igualar el largo de la melena y el flequillo.

Desde el divertido incidente capilar, Gabriella ha vuelto a lucir su melenita francesa impoluta, accesorizada habitualmente con diademas y pasadores, por no hablar de su boina con redecilla, una de las tendencias de moda entre las 'it girls', justo lo que la hija de Alberto de Mónaco ha demostrado ser. Sí se mantiene, sin embargo, el marcado y amplio escalón entre el flequillo y el resto de la melena, lo que indica que no iba tan desencaminado el cambio de look de la pequeña.