El eyeliner rockero de Clara Lago, la verdadera obra de arte de los Goya

Vestido, joyas y accesorios pueden ayudar a inspirar un look beauty pero, cuando eres la presentadora de los premios Goya 2023 el maquillaje debe además adaptarse a los cambios de vestuario y resultar lo suficientemente llamativo como captar todas las miradas pero sin convertirse en una distracción. Difícil tarea.

El combo fashion elegido por Clara Lago para una tarea de tal envergadura era insuperable, con un escotadísimo -y aplaudidísimo a partes iguales- vestido de Dior, se le sumaban las sandalias de Aquazzura y las joyas de Bvlgari. Por lo que el look beauty, compuesto no solo por maquillaje sino también por peluquería y manicura, tenía que estar a la altura.

En un primer vistazo, lo primero que logró que nos detuviéramos en el rostro de Clara fueron las formas que se dibujaban en sus párpados. Pero, al poder contemplar el look al detalle, descubríamos una piel ultrajugosa y un maquillaje elaborado en exclusiva para lucir con el estilismo elegido por la actriz. La responsable, una vez más, era la maquilladora Paula Soroa que nos explicaba que el maquillaje tenía “un toque un poquito rockero porque el vestido lo pedía”.

La preparación de la piel en el día a día es fundamental, pero en días como estos, de jornadas maratonianas y focos, el tratamiento es ineludible. Sérum, tónico y crema acondicionaban la piel de la actriz para que la aplicación del maquillaje y su duración resistieran durante toda la velada. “Queríamos una piel muy glow junto con una mirada naíf”, contaba Paula Soroa a Vanitatis, nada más terminar de maquillar a Clara y a punto de preparar su siguiente maquillaje.

Para conseguir esa piel de fondo muy jugoso, pero también iluminada en los puntos claves, como se apreciaba sobre todo sobre el hueso del pómulo o en la mirada, la maquilladora jugó, sin embargo, con productos de diferente acabado. Mientras la base y el corrector eran fluidos, el trabajo se sellaba con polvo para conseguir un lienzo perfeccionado. El natural tono con el que se coloreaban los pómulos, era, en cambio, cremoso, concretamente, la maquilladora utilizó el archipopular Pillow Talk Blush Wands de Charlotte Tilbury, en tonos nacarados y fresas. Su textura facilita la aplicación y el difuminado, logrando un acabado mucho más natural.

Y llegamos a la mirada, el punto de fantasía del look, lo que la maquilladora denominaba ‘rock’ y que pretendía combinar una estética naíf con un medido toque de rebeldía, creando así el efecto de ‘ojos de muñeca'. Para lograrlo y jugando con los tonos dorados de los accesorios de Clara, sobre el párpado móvil se aplicaba un glow brillante en polvo, que se extendía hacia el lagrimal y también en la base de las pestañas. Además de con el pigmento dorado, el efecto también se lograba con un lápiz cremoso de destellos iridiscentes, el Hollywood Exagger Eyes Liner Duo de Charlotte Tilbury (negro y nacarado) que se aplicaba a ras de las pestañas inferiores y se difuminaba.

Por muy fino y casi imperceptible que pareciera, la maquilladora dibujaba un mini eyeliner al final de la línea de las pestañas para alargar la mirada, según explicaba. Lo rompedor llegaba con el delineado del párpado móvil, “siguiendo la cuenca del ojo he hecho eyeliner de un solo trazo”, explicaba Paula Soroa, que buscaba así lograr un trazo más rockero. Conseguido el defecto de una mirada muy luminosa, quedaba el otro objetivo, la mirada de muñeca, para lo que la forma de trabajar las pestañas era fundamental.

La estilista quería que las pestañas se vieran muy largas y definidas, buscando la sensación de los ojos de una muñeca tipo Puppet. Para conseguirlo, las trabajó en movimiento ascendente, pelo a pelo con la máscara Pillow Talk Push Up Lashes! para que quedaran bien dibujadas. En contraste con la sombra dorada de la base, las pestañas bien oscuras y definidas quedaban aún más vistosas.

El maquillaje pensado al milímetro se adaptó también a los estilismos que Clara Lago lució a lo largo de la gala, reforzando el uso del iluminador para que el glow no decayera. Lo que sí cambió fue el peinado pues, durante la alfombra roja, la actriz lució una melena lisa, texturizada y con una marcada raya central y sobre el escenario recogió su melena bob en un moño bajo de efecto messy. Un look modulable que permitía que el maquillaje destacara en cada una de sus intervenciones.

Como guinda del look, la manicura tampoco ha pasado desapercibida a nuestro ojo. En vez de lucir un esmalte llamativo o un diseño acrílico de varios centímetros de longitud, la actriz eligió una laca de uñas entre rosa y blanco de acabado traslúcido, al estilo de la manicura ‘clean girl’, reforzando de nuevo la idea de un look muy luminoso y discreto, pero con mucho glamour.