Así se decora la Navidad en el lujoso hotel El Palace de Barcelona

Todos sabemos que la Navidad es mucho más que luces y colores, es emociones, reencuentros y momentos cargados de magia. Sin embargo, una buena decoración nunca viene mal y por eso en el hotel El Palace de Barcelona, cada año, tiran la casa por la ventana para que sus clientes disfruten de estas fiestas mejor que si se quedaran en casa.

Encontrar la mejor manera de llenar sus espacios de lujo y fantasía no es problema para este hotel, que ha hecho de esta su máxima todo el año. El estilo minimalista es solo un recuerdo al poner un pie dentro de este lugar, donde el maximalismo se convierte en su carta de presentación, dejando espacios llenos de toques dorados, mullidas alfombras y muebles con encanto que hacen las delicias de todos sus visitantes.

Si durante todo el año este lugar es una gran opción para desconectar y disfrutar de una gran experiencia, en esta época del año es todavía mejor, porque no dejan nada al azar, desde las guirnaldas con las que cubren los pasamanos de las señoriales escaleras hasta las actividades dedicadas exclusivamente a celebrar estas fiestas. El Palace presenta una experiencia navideña inolvidable para la vista y también para el gusto.

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La tradición es la esencia de su decoración, con elementos de madera labrada como la que forma sus puertas, sus suelos de mármol claro con elementos en mármol oscuro para sumar estilo y diseño. Todo está cuidado al detalle, desde las molduras de las paredes hasta la elección de muebles tanto en las habitaciones como en las zonas de paso o de restauración.

La decoración navideña no es una excepción, encontramos verdes, rojos y dorados, adornos luminosos que cubren partes de las paredes y grandes abetos de Navidad colocados de manera estratégica por todo el lugar, llenando cada rincón de magia, ilusión y esperanzo. Aunque se suele decir que estas fiestas son para los niños, lo cierto es que una vez que llega la Navidad, todo el mundo puede presumir de sentir esas mismas ganas de la primera vez.

Los colores y los adornos se mueven en la tradición, pero no están solos porque también encontramos detalles igualmente llamativos y navideños: "Al ingresar a través de la entrada festiva roja, los huéspedes serán transportados inmediatamente a un ambiente festivo por el árbol de Navidad característico del hotel, flanqueado por soldados Cascanueces".

Este año, las decoraciones navideñas están diseñadas con un tema clásico de rojos intensos, verdes vibrantes y acentos dorados y se repiten en todo el hotel”, explican en su web. Estrellas, árboles, luces y lazos que recorren todo el hotel, pero que tienen un objetivo. Como señalábamos antes, El Palace de Barcelona no vive la Navidad a medias y organiza diferentes actividades para que todo el mundo pueda compartirla con ellos.

Desde encuentros con Papá Noel, que se producen en un marco incomparable donde no falta ni el buzón para meter la carta con nuestras peticiones, hasta un mercado navideño. Encontramos espacios para disfrutar de bebidas y música en directo, sus cocinas adaptan las opciones para estas festividades (aunque se mantiene la opción de viajar a los Alpes sin salir de Barcelona), todo se llena de luces, color y alegría.

Sin embargo, una de las ofertas más llamativas y que ha sido todo un acierto a pesar de no llevar mucho tiempo en marcha es su cine en la terraza. Unas acogedoras cabañas con mantas, cojines y bolsas de agua caliente para poder disfrutar de películas navideñas al aire libre sin que el frío sea un problema.

Un espacio idílico en el que de nuevo la decoración tradicional típica navideña, que combina tonos rojos, verdes, dorados y, sobre todo, muchas luces, se entremezcla con detalles tradicionales de la naturaleza más propia de los escenarios lapones en los que situamos a Santa Claus. La decoración típica de estas fiestas pasa a ser un aspecto más del lujo con el que se presenta este hotel, llenando de color sus rincones, cubriendo sus espacios de adornos brillantes, regalos y árboles de Navidad de todos los tamaños.

El Palace de Barcelona es el hotel de lujo más antiguo de la ciudad. Desde su apertura en 1919 ha visto desfilar el tiempo, un lugar fijo en la historia por el que han pasado personajes de renombre. A lo largo de su historia, ha potenciado su relación con el arte y los artistas, algo que todavía hace, albergando exposiciones y dedicando algunas de sus suites a las diferentes artes, como la danza, la arquitectura o la música.

Un hotel de lujo que no escatima en detalles a la hora de celebrar la Navidad, porque sabe que la ilusión de sus huéspedes no tiene límites, así como las ganas de disfrutar de estas fechas de una forma diferente y especial.