La lámpara de Ikea que no parece de Ikea: parece un objeto de coleccionista y no puede ser más original

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Cuando uno piensa en Ikea, suele venir a la mente un catálogo lleno de muebles funcionales, precios accesibles y diseño escandinavo minimalista. Pero hay piezas en el surtido que rompen con esa estética predecible, y STRÅLA lámpara de pie con forma de cerilla es una de ellas. Esta lámpara ostenta una creatividad sorprendente: tres cerillas gigantes cruzadas que, encendidas con su luz suave, parecen haber cobrado vida dentro de un salón.

Lo primero que llama la atención es su diseño juguetón y casi surrealista. Con estructura de pino macizo barnizado y cabezas de fósforo en brillante rojo, esta lámpara no pasa desapercibida: invita a una sonrisa al verla y rompe la monotonía visual de cualquier sala. Su altura —unos 67 cm aproximadamente— y la posibilidad de cruzar sus tres “cerillas” dan dinamismo al espacio, transformando lo utilitario en una instalación escultórica del hogar.

Pero su valor no reside únicamente en la estética. La lámpara es regulable en intensidad (en dos pasos), permitiendo controlar el ambiente lumínico según el estado de ánimo o el momento del día. La luz que emite es suave y cálida, ideal para rincones de lectura o para un ambiente acogedor en el salón. Además, el diseño aprovecha materiales sencillos —madera y policarbonato— para lograr un efecto singular sin disparar el precio: en Ikea España figura apenas 25 euros

Lo curioso es que precisamente esta sencillez formal hace que parezca un objeto de colección: alejada de lo industrial, su apariencia evoca piezas de diseño independiente. Cualquiera que visite un hogar donde se haya instalado tendrá que mirar dos veces para comprobar que, sí, es un mueble de Ikea y no una joya de estudio de diseño.

La lámpara STRÅLA pertenece a la serie STRÅLA de Ikea, que incluye otros objetos de iluminación decorativa con propuestas imaginativas, como pantallas, colgantes o lámparas mesitas que juegan con formas inesperadas. Esa línea muestra el interés del fabricante sueco por explorar diseños que trasciendan la mera función.

Sin embargo, ningún diseño es perfecto para todos los contextos. La STRÅLA destaca más en interiores con personalidad, estilos contemporáneos o ambientes desenfadados. En espacios demasiado clásicos o recargados podría chocar. Además, al tratarse de madera y barniz, requerirá ciertos cuidados para evitar desgaste visible con el paso del tiempo. Pero estos detalles no restan valor a su singularidad.