Marc Jacobs, el más influyente de los diseñadores norteamericanos
Triunfó en los 90 con el estilo que mejor se adecuaba a esa época: el grunge, y desde entonces no ha dejado de dar rienda suelta a su creatividad... y a la polémica
A Marc Jacobs se le atribuye ser el creador del grunge, si bien su mérito fue adoptar la estética de esta corriente de música alternativa y subirla a la pasarela. Fue en 1992 y aunque la colección supuso un fracaso de ventas, catapultó al diseñador a lo más alto del panorama de la moda internacional, donde continúa desde entonces.
Nacido 1963 en Nueva York (Estados Unidos), Marc Jacobs tuvo claro desde que era un niño su pasión por diseñar. Huérfano de padre, fue criado a temporadas por su abuela paterna, su referencia y su tabla de salvación, en New Jersey. Licenciado en la Escuela Superior de Arte y Diseño, perfeccionó después sus estudios en la famosísima Parsons School for Design, donde llegó a obtener hasta tres premios con su trabajo de fin de carrera, una colección de punto de inspiración pop-art tejidos a mano por su abuela que marcó el comienzo de su trepidante trayectoria.
Los comienzos de la marca
Rápidamente obtuvo sus primeros encargos para producirlos industrialmente y venderlos en una boutique en Manhattan, Charivari, la tienda que fue durante décadas referencia para la comunidad fashion en Nueva York. Además, fue al cierre de ese desfile donde conoció a Robert Duffy, quien es desde entonces su pareja comercial. Juntos fundaron la marca comercial Marc Jacobs en 1985, y presentaron su primera colección solo un año después.
1992 fue el año del fracaso que marca su éxito. Marc y Robert empezaron a trabajar para la firma americana Ellis, diseñando su línea femenina, y la colección de Marc Jacobs inspirada en el grunge, gracias a la cual conocería a su gran amiga Kate Moss, no gustó a la compañía. A pesar de ser un éxito para la crítica, Marc fue rápidamente despedido y su carrera empezó a despegar. Un año después obtendría el más prestigioso premio de la CFDA al mejor diseñador del año, al que siguió su primer desfile de prêt-à-porter en el que modelos de la talla de Naomi Campbell o Linda Evangelista desfilaron sin cobrar como señal de apoyo incondicional al diseñador.
Marc Jacobs, director artístico de Vuitton
Sin duda, su papel de director artístico de Louis Vuitton durante casi dos décadas es el que más popularidad ha dado al diseñador americano. Bernard Arnault, director del grupo LVHM, ha dicho de él que es “una de las personas más talentosas con la que he trabajado, si no la que más”. De hecho, su confianza en él fue completa, otorgándole la dirección creativa de todas sus líneas y aportándole fondos que le permitieron desarrollar su propia marca. Marc Jacobs consiguió dar un giro a la clásica marca de bolsos y maletas europea, trasformándola en una firma moderna y global gracias a sonoras colaboraciones con artistas como Takashi Murakami o Richard Prince, que han sido capaces de crear bolsos que rápidamente se han convertido en objetos de culto.
Además de diseñar las colecciones de su marca principal y Marc by Marc Jacobs, la hermana asequible de la marca, tiene una línea para niños, Little Marc Jacobs. Con tiendas en todo el mundo y una línea de gafas, relojes, perfumes y belleza, la palabra de Marc Jacobs se espera cada temporada para dictar tendencia. Y presumiblemente, va a ser así por mucho tiempo.
A Marc Jacobs se le atribuye ser el creador del grunge, si bien su mérito fue adoptar la estética de esta corriente de música alternativa y subirla a la pasarela. Fue en 1992 y aunque la colección supuso un fracaso de ventas, catapultó al diseñador a lo más alto del panorama de la moda internacional, donde continúa desde entonces.