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Eva Perón, París, el Ritz y la reunión que la convirtió en leyenda
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Así se creó la imagen de Evita

Eva Perón, París, el Ritz y la reunión que la convirtió en leyenda

Hace 75 años que Eva Perón puso un pie en el continente europeo. Durante los meses de junio y julio, la primera dama argentina paseó por España, Italia, Francia y Portugal

Foto: Evita Perón, en París. (Getty)
Evita Perón, en París. (Getty)

Hace 75 años que Eva Perón puso un pie en el continente europeo. Durante los meses de junio y julio, la primera dama argentina paseó por España, Italia, Portugal y Francia en una de las giras más exitosas que se recuerdan. En nuestro país, el Gobierno de Franco puso todo de su parte para demostrar las buenas relaciones que existían entre ambos países, así como congraciarse con un 'amigo' del que dependía su devenir económico. Todo fue poco para recibir a Evita.

La mujer de Perón, consciente del interés que despertaba allá por donde pasaba y más aún de lo icónico de su figura para el propio régimen argentino, preparó de manera concienzuda el viaje. Sobre todo un apartado en especial: el de la moda. Para ello contó con la ayuda de la española Ana de Pombo, que se encargó de crear y elegir para ella un magnífico e impresionante equipaje que ocupaba una de las habitaciones que se le habían destinado como residencia durante su estancia en Madrid en el palacio de El Pardo.

placeholder Evita Perón y Franco. (Getty)
Evita Perón y Franco. (Getty)

Pese al calor, Evita no dudó en deslumbrar a los españoles de a pie -y a las fuerzas vivas del régimen- con un desfile de joyas y pieles que no solo engrandecían su figura, sino que también hacían de menos a Carmen Polo. Fue muy comentada en aquel momento en los mentideros de la villa y corte la disputa que había entre ambas. La argentina, en plena juventud, no tenía ningún tipo de reparo en mostrarse mucho más glamurosa que su anfitriona, generando una verdadera tensión diplomática que acabó, según cuentan, con la española prohibiendo a su marido meter a alguien que no fuera de la familia en 'su casa'. Cuando Polo vio cómo se cerraba la puerta del avión de Evita, aseguran que descansó.

Tras haber recorrido prácticamente toda la geografía española, y marcharse con una de las colecciones de trajes regionales españolas más destacadas que existen, regalo del propio Franco, Perón puso rumbo al Vaticano para entrevistarse con Pío XII y, más tarde, volvió a coger el avión para llegar a Lisboa. Tras la capital lusa tocó el turno de París, una ciudad en la que Evita tenía un interés que iba más allá del diplomático.

En la apretada agenda que tenía la primera dama, hizo un hueco para una de las reuniones más importantes de la vida de Evita. En su habitación del hotel Ritz recibió el 23 de julio a cuatro de los diseñadores más importantes de la alta costura parisina, incluidos Christian Dior y Marcel Rochas. Todos acudieron a sus habitaciones parisinas donde le ofrecieron un desfile privado. En ellos mostraron a la 'reina de los descamisados' sus propuestas para esa temporada. La idea era clara: hacer de ella un personaje más glamuroso si cabía, con la idea de generar todavía un icono más importante del que ya era.

placeholder Evita Perón, en París. (Getty)
Evita Perón, en París. (Getty)

Como recoge la prensa del día 24 de julio, si bien se había advertido a las casas de moda que no se iba a realizar la adquisición de ninguna prenda, Eva Perón no se pudo resistir a dos creaciones. Entre ellas, un vestido de noche que Jacques Fath había realizado para su mujer, Geneviève. Este dato es clave, ya que este diseñador será uno de los creadores fetiche en la historia de Evita. De hecho, él firmará el vestido con el que aparece en el retrato oficial que se hizo con Juan Domingo Perón, el único que se conserva de la pareja y uno de los más emblemáticos de su vida.

Pero la iniciativa no quedó aquí. No conforme con el desfile, la argentina solicitó a las casas de moda que le enviaran a Buenos Aires sus propuestas para la próxima temporada, con la idea de adquirir nuevos diseños que harían más grande aún si cabe la figura de una de las mujeres más emblemáticas del siglo XX.

Tanto es así que, a partir de esta visita, el look de Evita cambió para proyectar una imagen más internacional y lujosa. De hecho, habituada a vestir casas argentinas como Paula Naletoff, Henriette o Bernarda, de siluetas más rígidas, tras su visita a París en 1947, incorporó el New Look de Dior, con cinturas estrechas y voluminosas faldas. Es entonces cuando también adopta la imagen que la convirtió en icono, con pelo recogido con rodete y labios rojo, dejándonos así una imagen para la historia que, 75 años después, todavía se recuerda.

Hace 75 años que Eva Perón puso un pie en el continente europeo. Durante los meses de junio y julio, la primera dama argentina paseó por España, Italia, Portugal y Francia en una de las giras más exitosas que se recuerdan. En nuestro país, el Gobierno de Franco puso todo de su parte para demostrar las buenas relaciones que existían entre ambos países, así como congraciarse con un 'amigo' del que dependía su devenir económico. Todo fue poco para recibir a Evita.

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