Fiebre metalizada: la tendencia que te vas a animar a llevar en los próximos meses

La obsesión de la moda por los metalizados este otoño viene fuerte. Y no lo decimos solo porque el pantalón que parece bañado de aluminio se haya vuelto omnipresente en las últimas semanas, sino porque la cantidad de prendas y complementos que se han declinado esta temporada en plateado o dorado es prácticamente inabarcable.

Obviamente la fiebre por el metal no es nueva, puesto que cada vez que el calendario se aproxima a las fechas navideñas, el lamé, las lentejuelas y el glitter hacen acto de presencia. Lo que sí resulta una primicia es que haya aparecido con tanta fuerza al final de verano y con la intención de estar presente en contextos que no son para nada exclusivamente festivos. Porque la idea que plantean desde firmas como Loewe, Gucci, Acne Studios o Michael Kors es trasladar todos estos brillos al ámbito diurno. ¿Cómo? Con vestidos de efecto arrugado como los que vimos en el desfile de Proenza Schouler, con cazadoras de aviador en formato oversize como las ideadas por Coach o, por supuesto, en pantalones del estilo de los que Isabel Marant incluye en su colección.

Una de las firmas que más en serio se ha tomado la tendencia ha sido Zara. El gigante del grupo Inditex presentaba en el mes de mayo una editorial bajo el nombre Sunlight Moment protagonizada por Lila Moss que parecía venir del futuro y, en vista del éxito, a finales de agosto daba un paso más. Entonces pasaba a incluir entre sus novedades una amplísima selección de piezas metalizadas con faldas, vestidos lenceros, tops de tirantes, chalecos, abrigos, vaqueros, chaquetas cortas, shorts, capas, camisetas, sandalias, bolsos, sudaderas… Cualquier prenda o accesorio que te pase por la mente ya había sido materializado por la marca de alguna u otra forma.

El repertorio que ha conseguido llevar a sus tiendas permanece aún presente en las últimas semanas y resulta magistral para iniciarse en esta tendencia si tenemos en cuenta que Zara se ha esforzado incluso en hacerlo en distintas intensidades tirando tanto hacia el oro como hacia la plata para que no haya nadie que se quede fuera por su gusto.

La variedad de elementos de acabado metálico que se encuentra esta temporada en otros sellos accesibles como Mango, H&M, Sfera o C&A también es destacable, especialmente si nos centramos en los accesorios. Sandalias, stilettos, botines y zapatos planos con cordones se han teñido de bronce o argento para poder poner con ellos el acento brillante a cualquier estilismo.

También los pendientes y collares han cobrado más luz que nunca aún en los casos de ser bisutería –entre las propuestas de firmas como Singularu hay de todos los tamaños y formatos posibles capaces de convencer hasta a las más excépticas–, del mismo modo que los bolsos en mayor o menor medida han sabido acogerse a esta corriente que no les resulta para nada desconocida. Parfois, por ejemplo, es una de las más oferta metalizada presume.

Esta es, la de los accesorios, la manera más sencilla de sumarse a la tendencia porque solo requiere de pequeñas dosis para aportar luz a cualquier estilismo. Sin embargo, la oportunidad que nos brindan las diferentes firmas de rendirnos ante los metalizados es tan potente que merece la pena ir un paso más allá.

Quizá sea por ese afán de la industria de remitirnos a la década de los 2000, en la que todo era con tintes galácticos, o puede que se deba simplemente a una evolución de la conocida como 'moda dopamina' por el efecto positivo en nuestro estado de ánimo que son capaces de provocar ciertas prendas con carácter enérgico –en este caso nadie puede negar las ganas de fiesta que transmiten el plateado y el dorado–, pero nadie duda de que es el momento idóneo para aprovechar esta nueva expresión brillante. Ve saliendo del modo 'barbiecore' porque ahora es el turno de la fiebre metalizada.