Javier Bardem cumple 50 años: novias, ídolos, traumas y obsesión por protegerse
El actor da una entrevista de 20 minutos a TCM en la que habla de todas sus inquietudes, aunque obvia en todo momento a Penélope Cruz, su mujer, y sus hijos
Encantador y sonriente, como es él cuando está cómodo, Javier Bardem cumple hoy 50 años y da una entrevista en TCM en la que habla de lo que le importa. Su trabajo, su familia, sus ídolos y su madre. Vestido con unos vaqueros y una camiseta azul marino, bronceado, tranquilo e hipnótico, el actor madrileño charla durante 20 minutos de su profesión, a la que profesa respeto y devoción.
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Casi media hora en la que el actor no nombra a su mujer, Penélope Cruz, en ningún momento. Alérgico a dar titulares sobre su vida privada, el actor obvia a la mujer que conoció en un plató de rodaje, precisamente, y que le cambió la vida hace unos años. Tan obsesionados están en proteger su privacidad que no dudan en invertir miles de euros en ella. Este verano pasado, sin ir más lejos, pasaron unos días en familia en el Algarve, donde se alojaron en un complejo que cuesta 8.000 euros la noche.
Fue en el exclusivo Vila Vita Parc, ubicado en la localidad de Armaçao de Pera, donde alquilaron la villa más prémium del resort portugués. Habla Bardem con ilusión de su carrera y su vida y nadie podría imaginar escuchándolo que se trata de una auténtica estrella de Hollywood. Por cierto, suele ser allí donde tanto Bardem como Cruz hablan más abiertamente de su vida íntima.
Recordada es una entrevista que el actor dio a la revista 'Esquire', en su edición americana, en la que llegó incluso a contar sus traumas de infancia con un "padre despótico" que siempre estuvo "ausente". Inclusó habló de sus hijos, algo sagrado para la pareja: "Mis hijos son increíbles. Nos tienen en sus manos. Lo que más me gusta es pasar horas y horas jugando a princesas y dragones con ellos y con mi mujer".
El actor llegó a consolidar su relación con Penélope después de haber mantenido un escarceo sentimental durante el rodaje de 'Jamón, Jamón', la película de Bigas Luna que les encumbró. Y después de haber tenido muchas novias conocidas, como Belén Rueda, Ruth Gabriel o la traductora Cristina Payés, con la que compartió su vida diez años. Finalmente fue Cruz con quien decidió tener una familia.
Bardem es consciente de haber tenido suerte, además de poseer talento: "He tenido la bendición de encontrarme en la vida con gente muy generosa y talentosa como Bigas Luna, Miguel Hermoso o Julian Schnabel. Viniendo de una familia de actores y directores, que saben lo que es trabajar y no trabajar, soy consciente de la enorme suerte que tengo y no hay día en el que no intente dar lo mejor de mí porque eso se lo debo a todas esas personas que me dieron la oportunidad de ser actor".
Ni rastro de Penélope en toda la entrevista, aunque en el vídeo aparezca en alguna de sus interpretaciones conjuntas. El actor prefiere hablar de su familia y de su infancia y de cómo le entró el veneno de la actuación, ya cuando era pequeño. Cuenta incluso que hubo un tiempo en el que veía 'El Padrino II' varias veces al día y se sabía los diálogos de memoria.
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Es curioso cómo recuerda su infancia al lado de su madre, la también actriz Pilar Bardem, quien llegó a la gran pantalla ya de mayor, después de pasar una vida dedicada al teatro. Unas tablas de las que Bardem se aleja con miedo. "Mi madre, Pilar Bardem, hacía mucho teatro y la veía trabajar. Quizá por eso no hago teatro, porque me daba cuenta de lo mal que lo pasaba y lo difícil que es", dice en la entrevista. "He crecido en los camerinos y he visto a mi madre pasar por el proceso de nervios, de tensión y de exposición, y yo me preguntaba: '¿para qué salir delante de tanta gente?' Ahora sí lo entiendo".
Con un Oscar, un Globo de Oro, un BAFTA, cinco Goyas, el premio al mejor actor del Festival de Cannes y dos Copas Volpi de la Mostra de Venecia, Bardem sigue teniendo ídolos y uno en especial todavía le emociona: Al Pacino. "Era muy amigo de Julian Schnabel, el director del film, y quedó con él para comer. Yo tenía una cámara de fotos y me hice una en el espejo del baño para recordar la cara que tenía al conocer a Al Pacino", dice. "Me encontré con un ser adorable, humilde, divertidísimo, cariñoso, generoso. Todo lo que te pueda decir es poco. A través de los años le he ido conociendo y siempre ha sido muy amable conmigo. Todavía le importa lo que hace. Siente inseguridad y duda, miedo, investiga y nunca se relaja".
La llamativa ausencia de Penélope en esta y en gran parte de sus entrevistas no es más que una muestra más de la enorme alergia que sienten ambos a hablar de su vida privada. Instalados en una bonita casa ajardinada y con piscina en San Agustín de Guadalix, el actor vive entre maletas, siempre dispuesto a aceptar un nuevo reto artístico. Y a sus 50 años le queda mucho tiempo para dar guerra.
Encantador y sonriente, como es él cuando está cómodo, Javier Bardem cumple hoy 50 años y da una entrevista en TCM en la que habla de lo que le importa. Su trabajo, su familia, sus ídolos y su madre. Vestido con unos vaqueros y una camiseta azul marino, bronceado, tranquilo e hipnótico, el actor madrileño charla durante 20 minutos de su profesión, a la que profesa respeto y devoción.