Salinas, campo, ingeniería y libros: la herencia empresarial de Alfredo Fraile

Ni en España ni en Miami. Ni a su nombre ni al de sus empresas. Alfredo Fraile murió como vivió, sin grandes alharacas: tras más de 50 años de profesión en lo más alto, tenía decenas de empresas pero ni una propiedad inmobiliaria a su nombre. Famoso por haber sido el mánager de Julio Iglesias durante los primeros 15 años de su carrera, la muerte de Fraile, la semana pasada víctima de covid, conmocionó al mundo de la música y al de la cultura en general.

Asesor de Adolfo Suárez y de tantos grandes nombres del país, Fraile pensaba más en la familia que en amasar una fortuna. Activo, emprendendor nato y con ganas de probar suerte en otros ámbitos, su vida empresarial fue siempre movida y en el momento de su muerte ostentaba 53 cargos en un total de 36 sociedades, muchas de ellas inactivas desde hace tiempo. Su espíritu emprendedor le llevó a intentar abrirse camino en sectores tan dispares como la extracción de sal y la edición de libros. El coronavirus pudo con él.

Tremendamente familiar, muchas de sus sociedades eran gestionadas directamente por él, su mujer, María Eugenia Peña, y por alguno de sus seis hijos (Alfedo, Andrés, María Eugenia, Alejandra, Borja y Lucía). En Alfil Comunicación, por ejemplo, aparecen todos en diversos apartados de la empresa, desde consejero delegado a presidente y administrador. Algo que se repite en muchas sociedades, como en la citada Alfil Telecine. Este representante y relaciones públicas había invertido en casi todos los sectores imaginables, desde la restauración y la ingeniería hasta la prensa, la comunicación y, por supuesto, la cultura (tuvo una editorial).

Visión y mundo

Con las empresas Sefarad Salud SL y El Mundo de la Salud II SL intentó hacer negocio con la extracción de sal, y con Galería A SL intentó hacer lo propio con la edición de libros de alto nivel. Agrícola FG SL fue una empresa dedicada al campo y con Logística de Imagen intentó ser intermediario de productos diversos.

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Jose Madrid

Su capacidad de trabajo y sus conocimientos de medio mundo, por el que había viajado por su profesión principal, le dieron el empuje necesario para intentar encontrar un hueco empresarial en sectores diversos. Incluso formó parte de Alhambra Marroquí Española de Cooperación y Negocios SA, una gestoría dedicada a la contabilidad, teneduría de libros, auditoría y asesoría fiscal.

Sin propiedades

Fraile Lameyer era un tipo activo que mantenía su papel de administrador único en muchas empresas, aunque en realidad a las que más se dedicaba eran cuatro: Caribe Visión, Alfil Telecine, Cleanenergy y Checkin. Ninguna de estas sociedades tiene propiedades a su nombre tampoco.

Durante unos años, Fraile y su familia se mudaron a Florida, cerca de Julio Iglesias. En Estados Unidos nació una de sus hijas, Lucía, en 1981. Y entonces, según algunas informaciones, se compraron una casa. En la actualidad, no obstante, Fraile no tenía nada a su nombre en Miami.

En todas las empresas aquí citadas aparece todavía Fraile como presidente, consejero delegado o administrador único. Y casi todas son empresas que hace años que no registran actividad. Hacía un tiempo que Fraile prefería estar en su casa del barrio de Chamberí con su mujer, María Eugenia. Juntos, como recordaba este artículo de Paloma Barrientos, disfrutaban ejerciendo de abuelos, dedicando a sus nietos el tiempo que a veces tuvo que ‘robar’ a la educación de sus hijos por tener que estar cuidando de algunos de sus representados.