Muere Jordi Rebellón, el médico televisivo que llevó la discreción por bandera

Tenía más de 25.000 seguidores y su último post lo colgó hace cinco días para recomendar la obra de teatro 'Dribbling'. Su repentina muerte ha causado conmoción y las redes sociales se llenaban enseguida de mensajes de compañeros de profesión y personas anónimas. Nos ha dejado Jordi Rebellón, un actor que, pese a la enorme popularidad que le granjeó su papel de doctor Vilches en 'Hospital Central', siempre supo llevar su vida privada muy apartada de los medios de comunicación.

El actor, de 64 años, había vivido unos meses duros, pues recientemente perdía a su madre, como él mismo anunciaba en la mencionada red social. El pasado mes de marzo, tras este triste suceso, Jordi Rebellón, a quien también vimos en la serie 'Mercado Central' de TVE, quiso agradecer al personal del Hospital de San Rafael de Barcelona los cuidados a su madre, con unas emotivas palabras.

El actor barcelonés agradecía "el trato impecable de cariño, generosidad y profesionalidad en los últimos momentos de vida de nuestra madre Paquita. Gracias. Descanse en paz", y lo acompañaba con una foto de ambos juntos.

Fueron doce años los que intervino en 'Hospital Central' y que le permitieron entrar en los hogares de todos los españoles, pero deja una notable carrera interpretativa en la que la pequeña pantalla fue muy protagonista. Así, le vimos en 'Amar es para siempre', 'Servir y proteger' o 'Sin identidad'. Y en las tablas cosechó grandes éxitos, entre otras funciones, en 'El funeral', al lado de la emblemática Concha Velasco.

Poco trascendió de su vida sentimental, porque así quiso que fuera, y no tuvo hijos. Siempre mostró una gran admiración por sus padres, estuvo a punto de ser futbolista, pero optó por la interpretación y, aunque nada mitómano, se confesó admirador de Paco Rabal y Michelle Pfeiffer. Él mismo lo contaba en una entrevista en 'Diario de Córdoba': "Con 18 años me iba a fichar la Gramanet, en Tercera División, pero les dije que jugaría los domingos, pero que no entrenaría, porque por las noches iba al teatro a ensayar. Y, evidentemente, me dijeron que no. Empecé haciendo teatro a los 15, para mí era un veneno. Luego trabajaba en un banco y lo alternaba con el teatro amateur. Hasta que llegó un momento en el que decidí que quería intentar vivir de lo que me gustaba. A los 31 años rompí con todo, aunque no empecé a ganarme la vida como actor hasta los 41".

Una de las noticias menos gratas para él fue ser condenado a pagar 1,34 millones de euros a Hacienda más las costas judiciales. Nos tenemos que remontar al otoño de 2019. El intérprete había perdido dos recursos contra Hacienda por su declaración del IRPF, tal y como avanzaba 'Cinco Días'. Los jueces de la Audiencia Nacional ratificaban entonces lo que señalaron los inspectores, que el actor facturaba su trabajo en series, películas y publicidad indebidamente a través de una sociedad. Además, se deducía gastos que no tenían nada que ver con su función como actor.