El respetado 'luto' de Antonio Banderas

Antonio Banderas quiere a Málaga y parece que los malagueños adoran a uno de sus ciudadanos más ilustres. Para muestra, un botón. El último viaje del artista a su ciudad para participar en los actos de la Semana Santa no ha supuesto un baño de multitudes como en anteriores ocasiones. Y es que sus conciudadanos han respetado su luto, no en vano, su querido padre falleció hace unas semanas.

Durante su estancia en la localidad andaluza, Banderas vivió con tristeza las procesiones. El actor se apenó mucho al no ver a su padre en uno de los balcones del recorrido, donde sí estaban su madre y su mujer, Melanie Griffith. Pero los malagueños respetaron las lágrimas del artista. A diferencia de otros años, en los que siempre estaba rodeado de fans a los que firmaba fotos, sus admiradores, quizás viendo el gesto compungido del protagonista de El Zorro, no le acosaron, sino que respetaron su dolor.

Banderas ha sido consciente del respeto que le han profesado los malagueños y muchos medios de comunicación. Por ello, días más tarde, agradeció a través de una charla digital a los periodistas y a la gente en general el respeto con el que le trataron durante estas fechas. Ni una mala pregunta ni una mala cara. En definitiva, ni una crítica por su actitud menos cordial que anteriores ocasiones.

El padre de Antonio Banderas falleció hace unas semanas. El artista siempre había estado muy unido a su progenitor. Pese a la distancia, el actor nunca perdió el contacto con su familia, a la que visitaba como mínimo varias veces al año. Cuando su padre enfermó, los Banderas se instalaron en Marbella, ciudad a la que el artista viajaba con frecuencia para cuidar a su padre. De hecho, muchas veces nadie se enteró de su presencia en la localidad de la Costa del Sol donde protegía al patriarca del clan.