Marina Danko reconoce entre lágrimas haber tenido problemas económicos

No son buenos momentos para Marina Danko. La exmujer del torero Sebastián Palomo Linares durante los últimos 34 años aceptó este miércoles enfrentarse a los periodistas por una cantidad elevada de dinero, tras firmar un contrato con una conocida marca de productos adelgazantes, de la que ahora es imagen. La diseñadora de joyas colombiana, que ha rehecho su vida sentimental con su primo Celio, reconoció, compungida y emocionada, tener problemas económicos y llevar muy mal el divorcio del que fuera su marido y padre de sus tres hijos.

"Trabajo porque lo necesito. Yo he empezado de cero. He salido de la que fue mi casa sin nada. Al principio no contesté a nadie porque me sentía mal,  luego di una exclusiva en Hola, que sentó muy mal a la gente. Hay que imaginarse cómo debía estar yo en ese momento para dar una exclusiva. Yo tengo que seguir adelante y además tengo que mantener a mi hijo Andrés, que todavía está estudiando y vive conmigo en Madrid”, dijo la ex del matador de toros en conversación con Vanitatis. En cambio, reconoció haberle regalado un coche a su hijo Sebastián, el mayor de los tres, ya que en breve vuelve a los ruedos.

Marina rompió a llorar al recordar a Sebastián Palomo Linares, cuyo matrimonio, según sus propias palabras, comenzó a virar peligrosamente hacia el precipicio muchos meses antes de que la noticia trascendiese a los medios de comunicación. “Yo a Sebastián siempre le quise y él lo sabe. Yo lleva sufriendo mucho tiempo. Concretamente, cuatro años de sufrimiento. Por mi parte no se rompió el amor. He llorado mucho y sigo llorando, las cosas no se borran así de un plumazo, mi vida la aparqué por él, la di por él. Le he respetado toda mi vida y él lo sabe.”. Danko en cambio prefiere no especificar cuáles fueron los motivos reales de la ruptura ni tampoco si todos sus hijos mantienen una buena relación con su padre, quizá los temas que más incógnita e interés despiertan en la historia.

Al ser preguntada si el noviazgo actual de Palomo Linares con la venezolana Lilia López fue la razón de su sufrimiento, Danko manifiesta: “En la vida, Dios todo lo pone en su sitio. Si ella dice que yo puedo estar molesta, por algo será. Tan sólo les deseo que sean felices”. En cambio, no guarda ningún reparo en acusarle públicamente de romper su matrimonio. “Lo he pasado francamente muy mal y lo peor de todo es que creo que ha sido de forma injusta. Fue algo que me pilló inesperadamente. Nunca en mi vida imaginé que mi matrimonio iba a terminar así. Me gustaría olvidar todo, porque no es agradable. Nunca quise romper mi familia. No puedo entender como Sebastián puede decir que he sido un mal sueño, no puedo entender cómo un mal sueño puede durar 34 años. Pero yo le he amado, respetado y cuidado todo este tiempo. Eso no me lo quita nadie”.

También ha querido aclarar el origen de su relación con su primo Celio, con el que se ha rumoreado a su vez que mantenía un romance antes de que se rompiera su matrimonio con el matador de Linares.“Hacía mucho que no veía a Celio, soy una mujer entregada a mi gente. No tengo porque justificarme ante nadie. He sido mujer de mi hombre, que ha sido Sebastián. No entiendo por qué ese machaque, el quererme anular como persona… No tengo respuestas. No reconozco al que ha sido mi marido. Es que me lo han cambiado”. En cambio, Marina dice estar tranquila. “Mi conciencia está tranquila. Soy una mujer muy religiosa y dejo en manos de Dios muchas cosas. Si no volví a casa es porque todo el mundo tiene que tener una dignidad. Me siento una mujer entera y con mi honor limpio”, finaliza.