El sobrino del Rey y su esposa la 'montan' en un hotel de Barcelona

Mónica Martín Luque y Fernando Gómez Acebo la siguen "montando", no sabemos si por placer, o por sus reconocidas desavenencias.El último episodio protagonizado por la todavía pareja legal tuvo como escenario un hotel de cinco estrellas de Barcelona. El hijo de la Infanta Pilar y su mediática pareja habían viajado a la Ciudad Condal para asistir a la Fiesta "Flower Power Ibicenca" organizada en la sala Carpe Diem.

En la lista de invitados revelada a la prensa, los nombres de Mónica y Fernando encabezan "los Vips" del evento. Sin embargo, horas antes del acto, parece que la sobrina política del Rey don Juan Carlos quiso aclarar que acudían al evento como amigos y no como matrimonio. De hecho la organización reservó dos habitaciones en el Hotel Arts, a poca distancia de la discoteca lugar del escenario. También billetes de AVE en clase Bussinnes y dietas por un día.

Los periodistas acudieron a la cita a las diez de la noche esperando la presencia, entre otros, de los Gómez Acebo. Las horas fueron pasando y cerca de la medianoche, tanto Mónica como Fernando, no habían hecho acto de presencia. Fue entonces cuando un portavoz de la fiesta ibicenca explicó el motivo de dicha ausencia: "Martín Luque y Gómez Acebo se han peleado en el Hotel y han decidido no reunirse con el resto de invitados a la celebración".

Era la gota que colmaba el vaso de las rarezas entre la insigne pareja. Desde que vía exclusiva Martín Luque anunciara el pasado verano su separación, las incongruencias han reinado en esta relación. Ambos han seguido compartiendo techo, han viajado juntos en multitud de ocasiones, se han ido de compras al supermercado,se han sentado en una misma mesa fuera de su piso y han sido noticia por sus incidentes. Y eso a pesar de las afirmaciones de la sobrina del Rey del tipo "La separación no es un montaje" o "Nos estamos dando una segunda oportunidad, pero no significa que hayamos vuelto".

Entre el rosario de excentricidades acumuladas entre ambos cabe destacar el incidente en un avión en el que Gómez Acebo calificó de a la tripulación de "cuarta" por instar a la nuera de la infanta Pilar a introducir su bolso de la firma Loewe en el interior de la maleta, alegando que solo podían llevar un bulto como equipaje en el interior del avión. Finalmente, el avión salió con retraso y sus protagonistas se quedaron en tierra.

También dieron la nota en un aeropuerto al no querer recoger las heces de su perrito reclamando al servicio de limpieza bajo la amenaza de que "no tenían ni idea de quien era él". Asimismo Gómez Acebo dejó su coche en doble fila con un cartel en el cristal de su vehículo con la nota "Prioridad oficial.Casa de su Majestad el Rey".