La boda gótica de Tish Weinstock con Kate Moss y Olympia de Grecia como invitadas

Igual no la conoces, ni siquiera te suena y tal vez jamás habías escuchado su nombre, pero que Tish Weinstock trabaje como editora de belleza ha ayudado a que su círculo cercano esté formado por superestrellas de la moda: Kate Moss, Alexa Chung, Olympia de Grecia o Camille Charrière. Pues todas ellas, y algunas otras celebs más, han asistido a la original boda gótica de la británica.

Este fin de semana y coincidiendo con las celebraciones de Halloween, Tish ha dado el 'sí, quiero' a su pareja, el estilista Tom Guinness. Lejos de cumplir con los parámetros de un enlace tradicional, Tish y Tom han festejado su amor por la Iglesia con el negro como color del 'dress code', a golpe de disfraces y una decoración barroca de fondo que rozaba el exceso.

Con una personalidad de estilo tan singular como arrolladora, al igual que estas cuatro novias, la editora de belleza de la edición inglesa de 'Vogue' escogió un vestido de novia vintage. Corte de encaje floral, silueta ajustada, manga larga acampanada, semitransparencias, puntillas, velo de tul a juego y, como calzado, unas bailarinas de raso. ¿El resultado? Un look nupcial que recordaba al mítico personaje de ficción, Morticia Addams, pero con cambio cromático del negro al blanco.

* Si no ves correctamente este formulario, haz clic aquí

El outfit del novio, el estilista Tom Guinness, tampoco tiene desperdicio. Americana blanca, camisa en azul denim, pajarita y fajín de satén en negro, pantalón de vestir azul marino y zapatos oxford. Juntos y posando ya como marido y mujer, nos dejan una foto finish de un matrimonio diferente.

Tras pasar por la iglesia para unir sus vidas para siempre, los novios reunieron a sus familiares, amigos íntimos y compañeros de profesión en un palacio. No faltaron la 'it girl' Alexa Chung, la royal Olympia de Grecia, la modelo Adwoa Aboah, la periodista francesa Camille Charrière y la top model Kate Moss acompañada de su hija, Lila Moss.

Disfrazada para la fiesta, la mítica maniquí británica se metió en el papel de vampiresa, enfundándose en un vestido negro de raso con cola y colocándose prótesis dentales con colmillos afilados.

Con el segundo atuendo que lució, también vestido, pero metalizado y con la espalda descubierta, Kate Moss volvió a demostrar que por algo es una de las mujeres más perseguidas en el mundo de la moda.

Olympia de Grecia, hija de Pablo de Grecia y Marie-Chantal Miller, se disfrazó de madre cadáver: vestido negro con cuello halter, sandalias con plataforma de Saint Laurent y guantes a tono. Para sumar dramatismo a la escena, la royal posó junto a un carro de paseo para bebés antiguo y una muñeca en el brazo.

En el interior del palacio, el montaje y la decoración eran espectaculares. Mesas corridas o redondas con mantelería blanca, frutos de temporada y calabazas a modo de centros de mesa, pequeños jarrones con flores, candelabros y grandes velas. Hay más: paredes con papel pintado, cortinas de terciopelo granate, lámparas de araña con piedras de cristal en el techo, sofás y sillones tapizados, espejos con marcos dorados y muebles retro.

El juego de luces, entre claridad y oscuridad, acompañado de diferentes pinceladas de color, ayudaron a recrear esa imagen gótica que Tish Weinstock y Tom Guinness deseaban para su boda. La hija de Kate Moss, Lila Moss, subió un storie donde se podía contemplar un letrero neón con los nombres de los novios como bienvenida a los invitados en la puerta de la iglesia.

Ya de noche, el matrimonio se despojó de sus looks nupciales para disfrazarse de Romeo y Julieta, él con armadura cual caballero andante y ella con un vestido de época en azul cielo salpicado con pedrería plateada.

Para ir resumiendo. En negro, con Halloween como telón de fondo y con una contundente estética gótica. Lo visto y vivido este fin de semana en tierras británicas no es otra cosa que una original y oscura exaltación del amor completamente diferente a las clásicas celebraciones.