Abusos, drogas, delgadez... Kate Moss desvela sus momentos más oscuros
La supermodelo ha concedido una entrevista en la que recorre los momentos más polémicos de su carrera
Una de las miles de razones por las que Kate Moss es una de las supermodelos más emblemáticas y misteriosas de la industria es que en un momento en el que resulta prácticamente imposible no saberlo todo de la vida privada de las celebridades, que han confiado en las redes sociales para dar a conocer los entresijos de su vida bajo la premisa y la tranquilidad de que son ellas quienes controlan la narrativa y el mensaje, la británica ha preferido permanecer en la sombra.
En la actualidad, como directora creativa de Coca-Cola Light (puesto que han ocupado figuras como Karl Lagerfeld y Marc Jacobs), pocas veces se deja ver en eventos de moda, en los que suele acompañar a su hija dispuesta a convertirse en la Kris Jenner de una nueva cantera de modelos que gestiona a través de su agencia. Por eso nos ha sorprendido que Moss haya concedido una entrevista, algo poco habitual en ella, y al hacerlo ha abierto la caja de Pandora de los infiernos del cerrado mundo de la moda, que cada vez va dejando ver sus grietas con mayor asiduidad gracias a las voces de algunas modelos dispuestas a cambiar las cosas y a documentales que bucean en los infiernos de una industria en la que el glamour convive con un lado oscuro que no cesa de sorprendernos...
La supermodelo ha elegido la serie de podcasts de la BBC, Desert Island Discs, para hablar sobre las sombras de su carrera. Para hacerlo, ha confiado en la presentadora Lauren Laverne, a la que ha confesado que algunas de las campañas inolvidables con las que cambió la historia de la moda tuvieron un tenebroso revés que trajeron consigo experiencias "difíciles y dolorosas". La campaña de Calvin Klein en la que aparece junto a Mark Wahlberg en 1992 fue para ella complicada, pues mientras que el actor estaba acompañado por un séquito que cuidaba de sus intereses, ella se sintió "vulnerable y asustada". Ha explicado que todo giraban en torno a Wahlberg, que asegura “era muy macho”. "Jugaron con mi vulnerabilidad. Yo era bastante joven e inocente", ha dicho. Su inocencia, su inexperiencia y su juventud volvieron a ser empleados por muchos para aprovecharse de ella en las sesiones de fotos, en las que confiesa que tuvo que enseñar más piel de la que quería.
Asegura que no fueron pocos los fotógrafos que la habían "presionado" para hacerlo, llegando incluso a posar en topless sin sentirse en absoluto cómoda al hacerlo. “Tenía 15 años y me dijo ‘quítate la parte de arriba’, y me la quité. Era muy tímida entonces con mi cuerpo. Y dijo ‘quítate el sujetador’. Sentí que algo iba mal, así que cogí mis cosas y me fui. Creo que aquello agudizó mis instintos”, dijo acerca de una campaña de sujetadores que protagonizó. Por si fuera poco, su delgadez, siempre en el punto de mira, hizo de ella "el chivo expiatorio de los problemas de mucha gente", que se apresuró en señalar a la supermodelo como la culpable del boom del ‘heroin chic’. "Nunca fui anoréxica, nunca lo he sido... Nunca había tomado heroína. Estaba delgada porque no me daban de comer en las sesiones de fotos o en los espectáculos, y siempre había estado delgada".
La modelo no ha querido dejar de tocar momentos espinosos de su carrera, como cuando fue fotografiada consumiendo cocaína, unas imágenes que en su momento, paralizaron de lleno su trayectoria, aunque regresó por todo lo alto gracias a amigos como Marc Jacobs. "Me sentí mal y estaba bastante enfadada porque todos a los que conocía tomaban drogas. Pensé que era realmente hipócrita que se centraran en mí y trataran de quitarme a mi hija”, ha confesado en el podcast. Del mismo modo que Jacobs la apoyó a ella, Moss hizo lo propio con John Galliano. "Creo en la verdad, en la equidad y en la justicia. Sé que John Galliano no es una mala persona: tenía un problema con el alcohol y la gente se vuelve... Las personas no son ellas mismas cuando beben y dicen cosas que nunca dirían si estuvieran sobrias”, ha dicho para excusar los comentarios xenófobos que en una etílica velada parisina soltó el diseñador en un vídeo que, al igual que le ocurriera a Moss años antes, hizo que su carrera se tambaleara.
Incluso el mediático y polémico juicio entre Johnny Depp y Amber Heard ha sido comentado en el podcast, en el que Moss testificó a través de Zoom en el mes de mayo para aclarar si las declaraciones de Amber, que aseguró que cuando el actor salía con la modelo, la empujó por las escaleras, eran ciertas. "Sé que nunca me empujó por las escaleras. Tenía que decir esa verdad", ha aclarado a Laverne.
Una de las miles de razones por las que Kate Moss es una de las supermodelos más emblemáticas y misteriosas de la industria es que en un momento en el que resulta prácticamente imposible no saberlo todo de la vida privada de las celebridades, que han confiado en las redes sociales para dar a conocer los entresijos de su vida bajo la premisa y la tranquilidad de que son ellas quienes controlan la narrativa y el mensaje, la británica ha preferido permanecer en la sombra.